El aceite de oliva virgen extra es un ingrediente querido y fundamental en todo hogar mediterráneo. Las plantas aromáticas y las especias también. ¿Por qué no combinarlos?

Los aceites aromáticos no solo llenarán de sabores deliciosos tus recetas, sino que aumentarán su potencial en relación con la salud.

Añade a tus aceites especias y plantas aromáticas

Dar aroma al aceite es tan fácil como echar en la botella algún o algunos ingredientes aromáticos y dejarlos para que liberen todo su sabor. Aquí tienes algunas recetas para empezar a probar:

1. Aceite con guindilla

Corta 20 gramos de guindillas secas en aros (también se pueden poner enteras) y sumérgelas en medio litro de aceite. Deja que repose y prueba de vez en cuando, hasta que alcance la intensidad que deseas.

La guindilla es antiinflamatoria, favorece la digestión y combate los gases y el estreñimiento.

2. Aceite de orégano

Deja 2 cucharadas de orégano seco, 2 hojas de laurel y media cucharadita de sal en 250 ml de aceite durante 3 semanas. Luego fíltralo. Es ideal para ensaladas con tomate y platos de cocina italiana.

El orégano es una planta medicinal y aromática con propiedades digestivas, antioxidantes y expectorantes.

3. Aceite de azafrán

Basta con 2 gramos de hebras de azafrán por cada cuarto de litro de aceite. Se deja reposar un mes, y no hace falta filtrarlo. Este aceite marida con arroces, cremas y purés de verduras. Y le da un toque muy especial a la veganesa.

El azafrán es antidepresivo, hasta el punto de que en forma de suplemento puede sustituir a los medicamentos en casos de depresión leve.

4. Aceite de tomillo y romero

Sumerge 2 ramitas de romero fresco y 2 de tomillo limonero en 250 ml de aceite de oliva virgen extra. Añade una pizca de sal y agítalo. Deja que repose 3 o 4 semanas y fíltralo. Con este aceite puedes marinar tofu o tempeh.

El tomillo es un reconocido antiséptico, muy eficaz para prevenir la proliferación de virus y bacterias patógenos en el tracto respiratorio y digestivo.

El romero es una planta adaptógena: te hace sentir con más energía para afrontar las dificultades.

5. Aceite de albahaca

Lava a conciencia unos 15 gramos de hojas frescas de albahaca y luego sécalas muy bien. Sumérgelas en 250 ml de aceite de oliva. Opcionalmente puedes añadir una pizca de sal y 1 diente de ajo. Deja que repose 3 semanas y filtra.

La albahaca es digestiva y puede evitar los espasmos del estómago.

6. Una mezcla exótica para aromatizar tus aceites

Pon 75 gramos de jengibre en láminas, la piel de una naranja (sin la parte blanca) y un palo de canela en 250 ml de aceite (de una variedad suave). Deja que infusione a 65 ºC durante 3 horas. Luego déjalo reposar en la nevera y fíltralo.

Es muy adecuado para postres y masas dulces de panes y galletas.