El popular té yogui altamente aromático es una bebida de infusión de té con diversas especias, cuya combinación se basa en el arte curativo holístico indio del ayurveda. Según esta enseñanza, varias especias apoyan las tres energías vitales vata, pitta y kapha, que gobiernan el funcionamiento del organismo. Tanto si te identificas con las enseñanzas del ayurveda y su trasfondo tradicional como si no, esta infusión resulta deliciosa y aporta verdadero bienestar al cuerpo y al alma.

En lugar de comprar la bebida ya preparada en bolsitas para infundir, vale la pena hacer en casa una buena cantidad de mezcla para tenerla siempre a mano en la alacena. Hacerla tu misma es muy sencillo y no sólo te ahorrará dinero, sino que ayudarás a evitar envases innecesarios y además podrás darle tu nota personal.

Mezcla clásica para té yogui

El té yogui clásico consta de solo cinco ingredientes básicos. Sabe especialmente bien con un toque de leche o leche vegetal y también se suele degustar ligeramente endulzado. Según las enseñanzas del ayurveda, este té apoya a la constitución pitta. Para conocer cuál es tu constitución según el ayurveda puedes leer Las tres tipologías del ayurveda.

Ingredientes (para 100 gramos de té yogi):

  • 50 g de canela de Ceilán
  • 15 g de cápsulas cardamomo
  • 15 g de jengibre seco (puedes secar el jengibre cortándolo en rodajas y poniéndolo en el desecador o comprarlo ya seco)
  • 12 g de clavos de olor
  • 8 g de pimienta negra

Elaboración:

  1. Para preparar la mezcla de especias del té yogui, tritura todas las especies en un mortero o en un molinillo (no es necesario que queden hechas polvo).
  2. Para preparar el té yogui directamente en la taza, coloca de 3 a 5 g de la mezcla (alrededor de una cucharita de postre colmada) en un colador de taza y añade 250 ml de agua hirviendo. Deja reposar la mezcla de ocho a diez minutos.
  3. Si preparas el té yogui en un cazo, el sabor se desarrollará aún mejor, especialmente si las especias no quedaron muy bien trituradas. Para elaborarlo en una olla agrega de 3 a 5 g (una cucharilla colmada) de la mezcla de especias por taza (aproximadamente 250 ml) y cocina a fuego lento durante unos 20 minutos. Luego pasa el líquido a través de un colador.

Es mejor conservar la mezcla en una lata de metal o en un tarro con tapa de rosca y debes de almacenarla en un lugar fresco y seco.

Variaciones del té yogui

Para adaptar la receta clásica a tus preferencias personales puedes complementarla con plantas aromáticas que te gusten o incluso con frutas. Como inspiración, te presentamos una receta para un té yogui calmante y una mezcla para un té más vigorizante.

Té yogui calmante

Ingredientes (para 50 g de mezcla):

  • 25 g de la mezcla clásica de especias
  • 10 g de semillas de hinojo
  • 5 g de cáscaras de naranja secas
  • 5 g de hojas de melisa secas
  • 5 g de flores secas de lavanda

Los ingredientes que no tengas en casa o no puedas recolectar los puedes encontrar en heboristerías, supermercados ecológicos u online.

Té yogui estimulante

Ingredientes (para 50 g de mezcla):

  • 25 g de la mezcla clásica de especias
  • 10 g de hojas de menta secas
  • 10 g de cáscaras de limón secas
  • 5 g de jengibre seco


La menta, el limón y la dosis extra de jengibre dan energía y te calientan el cuerpo por dentro y dan a la infusión un sabor maravillosamente afrutado.

Para las variaciones individuales del té de yogi puedes experimentar con otros ingredientes a voluntad, puedes añadir otras especies, otras plantas aromáticas u otras frutas desecadas. Para inspirarte puedes mirar los ingredientes de los té yogi comerciales y hacer experimentos con ellos.

Si alguna vez no tienes té yogui en casa puedes elaborarlo fresco para una o dos tazas en lugar de producirlo en cantidades mayores para guardar. En ese caso puedes usar uno u otro ingrediente fresco, como jengibre fresco, cúrcuma fresca, pelas de fruta fresca ecológica como la manzana, trozos de mango... Deja volar tu imaginación y disfruta del resultado que obtengas.