Hacer tu propio desodorante con ingredientes naturales es un proyecto muy útil. Ahorras dinero, te aseguras de que el desodorante no contiene sustancias tóxicas y, además, es muy divertido elaborarlo. El primer paso de esta aventura es seleccionar los ingredientes adecuados.

Un desodorante casero puede contener una amplia variedad de ingredientes, como bicarbonato de sodio, aceite de coco, manteca de karité, agua oxigenada, vinagre de manzana o arcilla. Son productos que quizá ya tienes en casa y que, en cualquier caso, se consiguen fácilmente.

¿Dónde puedo conseguir los ingredientes?

El vinagre, el alcohol y la maicena o el bicarbonato de sodio se pueden encontrar fácilmente en cualquier supermercado. Los demás ingredientes los puedes encontrar en herbolarios, farmacias y tiendas de productos ecológicos, ya sean físicas o en internet.

Muchas recetas requieren aceites esenciales, que aportan propiedades desinfectantes y buen olor. Hay que tener cuidado con este producto porque si no nos fijamos te puedes llevar a casa un aceite pensado para ambientar y que, además, no sea natural.

En higiene y cosmética natural se utilizan aceites esenciales naturales puros, si es posible con certificación de producción ecológica. Fíjate si en la etiqueta aparecen estos conceptos.

En las fórmulas para hacer en casa hay posibilidad de hacer cambios en función del gusto personal, pero recuerda que no todos los aceites esenciales pueden entrar en contacto con la piel. Algunos son irritantes o necesitan diluirse mucho. Por eso es mejor que sigas al pie de la letra las instrucciones de una fuente de información fiable

En cualquier caso, para minimizar el riesgo, prueba el desodorante casero que hayas elaborado en una porción pequeña de la piel, en el antebrazo, por ejemplo. Si no aparece una irritación después de varios minutos, puedes usarlo en las axilas.

Un consejo general es no superar las 20 gotas por cada 100 mililitros de aceite o crema básicos. Es mejor comenzar con dos o tres gotas y aumentar la cantidad si es necesario.

¿Me va a salir más barato el desodorante casero?

Un desodorante de aceite de coco de fabricación propia, por ejemplo, cuesta menos de 1,50 euros los 100 gramos. Los productos desodorantes comparables son mucho más caros.

Puedes reducir el precio adquiriendo cantidades considerables de cada ingrediente en lugar de pequeñas dosis. Por ejemplo, con un kilo de aceite de coco, 400 g de bicarbonato de sodio y 400 g de maicena, se pueden preparar más de 50 porciones de crema desodorante (de aproximadamente 30 g cada una).

Te puedes preguntar si no se te va a estropear. Es cierto que la vida de los productos naturales caseros es más corta que la de los desodorantes con ingredientes sintéticos y conservarntes. Pero si no contienen mucha agua o son secos, su vida puede ser larga.

Por ejemplo, a una crema desodorante con aceite de coco y bicarbonato de sodio le puedes poner una fecha de caducidad de hasta dos años. En cambio, un desodorante de fabricación propia para aplicar con pulverizador durará solo unas pocas semanas. Este tiempo se puede aumentar significativamente empleando una proporción mayor de alcohol en la composición.

En general no es necesario que guardes tu desodorante casero en el frigorífico. Pero es cierto que un lugar oscuro y fresco es lo más adecuado. De hecho, si utilizas aceite de coco y quieres que el producto tenga consistencia de crema debes guardarlo a menos de 25 ºC (por encima de esta temperatura se convierte en líquido).

Si aprecias que tu desodorante huele a rancio es que los ingredientes grasos se han oxidado y ya no puedes utilizarlo. Si el desodorante te gusta, la próxima vez que vuelvas a elaborarlo puedes añadirle unas gotas de vitamina E (la encontrarás en farmacias), que evita que los aceites se estropeen.

Fórmula muy sencilla de desodorante casero

Ingredientes:

30 g de bicarbonato de sodio
30 g de almidón de maíz (maicena)
60 ml de aceite de coco

Preparación:

Mezcla los tres ingredientes para obtener una crema desodorante, capaz de mantenerte libre de malos olores durante todo el día. Si quieres mejorar la fórmula puedes añadir 10 gotas de aceite esencial de lavanda o de eucalipto.