Además, el cuerpo posee su propio mecanismo para indicar cuándo la necesita: la sed. Sin embargo, a menudo surgen dudas sobre qué tipo de agua es más saludable: ¿Es mejor el agua del grifo, la embotellada, la de manantial? ¿Es buena el agua con sabores? ¿Cuál conviene a los niños? Te lo contamos.

Por qué cada vez se toma más agua embotellada

Desde hace unos años el agua es objeto de un interés creciente. Parece que más del 80% de la población de nuestro país opta por beber agua embotellada y ya a nadie se le escapa que la hay de muchos tipos y que su consumo tiene una repercusión sobre la salud.

La explicación del auge del consumo de agua embotellada se encuentra en gran medida en su sabor pero también en que se percibe como más segura y de mayor calidad.

El agua del grifo que suministran las depuradoras es potable, es decir que ha pasado unos estrictos controles bacteriológicos y mineralógicos para asegurar que cumple ciertos parámetros.

Pero a pesar de estar clorada, por una simple cuestión de rentabilidad, algunos metales y residuos químicos como el aluminio, el plomo, el estroncio o el cobre no desaparecen por completo.

Otra cosa son las aguas minerales naturales. Surgen de fuentes naturales subterráneas y conservan la mayor parte de sus propiedades originales. Si por su composición tienen algún beneficio para la salud se denominan mineromedicinales.

La oferta de aguas minerales naturales es muy variada y puede confundir.

  • Las poco mineralizadas manan de suelos de tipo granítico. A menor mineralización, menor sabor.
  • En cambio, las duras, con mucho contenido en sales, especialmente calcio, se han filtrado por tierras calcáreas mediterráneas, que entregan fácilmente sus minerales.

Se pueden clasificar también según el mineral predominante en su composición.

  • En general las aguas con poco sodio (menos de 20 mg/ litro) son las más diuréticas.
  • Y las bicarbonatadas (más de 600 mg/litro de bicarbonatos) facilitan la digestión.

Conocer y apreciar las diferentes aguas forma parte de una cultura del bienestar natural.

¿Puede ser perjudicial el agua del grifo?

Cumple con todos los requisitos para que sea salubre y no produzca ningún efecto adverso. De hecho, no siempre es peor que todos los tipos de agua embotellada que existen.

El sabor es sin duda, uno de sus puntos más negativos. Y uno no conoce exactamente su composición, como en el caso de un agua mineral embotellada.

¿Qué debe indicar una etiqueta de agua?

La composicion química, avalada convenientemente.

En la etiqueta no se pueden detallar sus propiedades medicinales ni efectos terapéuticos.

Si el grado de mineralización, la fuente de procedencia y la fecha en que fue considerada válida para el consumo público. Asimismo, tiene que constar siempre la fecha de caducidad.

¿Qué tipo de agua conviene a los niños?

En principio, el agua más indicada es la oligometálica o de débil mineralización, sobre todo porque su contenido en sodio es bajo.

Si aporta calcio puede ser beneficiosa para niños en edad de crecimiento.

Una buena agua para ellos aportaría dosis mínimas de sodio pero máximas de calcio.

¿Hay que beber tipos de agua diferentes?

Si el agua es de baja mineralización no hay problema en beber siempre la misma.

De todos modos, una buena opción para las personas sanas consiste en ir combinando aguas de mineralización baja de composiciones algo distintas. De esta manera se puede ir disfrutando de las cualidades de unas y otras.

¿Es sana una bebida de agua con sabor?

En general, se trata de bebidas con más de un 95% de agua mineral natural y edulcorantes sintéticos y aromas naturales.

Son más ligeras y contienen menos azúcar que las bebidas refrescantes convencionales pero tampoco se les puede atribuir ningún beneficio específico.

Su única "ventaja" respecto al agua es el sabor.

¿Tiene beneficios el agua con gas?

El gas que se ingiere con el agua se acaba eliminando de una manera u otra, pero para las personas que ya normalmente tienen problemas de gases no es la más adecuada.

A menudo las aguas con gas pueden estimular la digestión. Quizá lo más recomendable sea beber agua con su dosis natural de gas, sin añadidos.

¿El agua adelgaza?

El agua, sea cual sea su tipo, no aporta energía y, por tanto, es imposible que aumente los depósitos grasos.

Tampoco "adelgaza". Pero si se bebe mucha, sobre todo con gas, ejerce un efecto saciante útil para una dieta hipocalórica.

Las aguas oligometálicas son las más diuréticas.

¿Cuál es la mejor agua para la litiasis renal?

Depende del tipo de litiasis renal que se ha sufrido. Si es por oxalato cálcico, conviene beber aguas oligometálicas (hasta 100 mg de residuo seco por litro) y, además, hacerlo en cantidad.

Hay que cuidar asimismo la dieta y, por supuesto, descartar posibles alteraciones en el riñón.

¿Hay que beber agua continuamente?

No. La sed marca la cantidad de agua que hay que beber. Tomarla sin descanso puede llegar a ser perjudicial para el riñón, ya que una diuresis exagerada puede producir una pérdida de minerales.

Beber mucha agua se identifica con la pérdida de peso, pero esto ocurre sobre todo si sustituye a bebidas refrescantes azucaradas.

¿Qué es el agua de manantial?

Puede ser resultado de una mezcla de aguas de diferentes fuentes, sometidas a varios tratamientos para su consumo.

A diferencia del agua mineral natural, no procede de fuentes subterráneas protegidas y su mineralización no es constante. Se trata de un agua apta para el consumo pero sin las cualidades de la mineral.