Sol, mar, montaña, andar descalzo por la hierba… Hay muchos placeres que podemos disfrutar en verano. Y uno de los mayores es degustar una buena comida con buena compañía al aire libre y hacer un pícnic.
Para ello, no hace falta pasar horas en la cocina preparándolo ni tenemos que tirar de bolsas de patatas fritas, ensaladas y hummus empaquetados. Podemos hacer un pícnic saludable, sostenible, delicioso y divertido con poca preparación.
Un menú saludable para tus pícnics
Lo más importante es elegir el menú adecuado. De esta manera, antes de confeccionar el menú de nuestro pícnic, tenemos que tener en cuenta varias cosas: los platos deberían ser ligeros, coloridos, llenos de fruta y verdura de temporada.
Además, los platos tienen que aguantar bien el transporte y las temperaturas y deberían de ser fáciles de comer con las manos o con un tenedor. También deberían ser fáciles de preparar porque lo último que nos apetece en estas épocas es pasarse horas en la cocina.
En este menú que os he preparado encontrarás platos que encantan todo el mundo, incluso a los niños, y a gente con estilos de alimentación diferentes.
Y que no se nos olvide el postre. Para elegirlo también tenemos que tener en mente que debe ser un postre que aguante bien el calor y el transporte. Por ejemplo, una tarta con nata no será lo más adecuado. Es mejor optar por postres con más cuerpo como brownies, galletas, pan de plátano, bolitas energéticas, magdalenas, barritas o, lo mejor y más simple, fruta, la reina de esta temporada.
Podemos hacer una macedonia de fruta o llevar fruta de temporada como sandía, cerezas, arándanos, melocotones, albaricoques, paraguayos, nectarinas, ciruelas… y servirla en un plato para que cada uno se sirva con las manos. Si queremos tomar un postre tipo flan, mousse o una tarta más frágil, lo podemos preparar en botes de cristal individuales.
Evita generar basura (y sobre todo dejarla por ahí)
Para llevar el menú al sitio donde hagamos el pícnic, podemos usar botes de cristal reciclados o tápers para ahorrar basura. A la hora de comer, podemos llevar cubiertos y platos reutilizables o bien invitar a que todos los presentes traigan su plato y tenedor. También existen platos y cubiertos de papel reciclables. Además, conviene llevar un bote con agua y jabón para lavarse las manos.