1 / 3
Escribir para superar el sufrimiento
Lo que leo en Mente Sana me ayuda, pero el daño que he sufrido durante mi vida me puede, por mucho empeño y ánimo de médicos, abogados y trabajadores de Asuntos Sociales. Me dicen que debo escribir, por mí, por todo el dolor que mis propios familiares me han causado y me están causando, por esta historia de maltrato, y porque dicen que puedo ayudar a otras mujeres. No sé por dónde empezar.
Rosa, Valencia
- Escribir sobre la propia vida tiene a menudo un gran poder terapéutico. Es un modo de catarsis, de sacar afuera lo que dentro genera tensión y malestar. Con frecuencia, también nos ayuda a entender, a conectar episodios de nuestras vidas que nos parecían inconexos o inexplicables.
- Por otra parte, saber de las experiencias difíciles que ha atravesado una persona puede ser de mucha utilidad y consuelo para otros. Así se pueden aprender nuevos enfoques, al mismo tiempo que sirve de ayuda para no sentirse solo, pues al leer se comprueba que alguien más está en el mismo camino. Para quien escribe, hacer algo útil con lo que ha sufrido suele ser un modo de dar sentido a esas arduas vivencias.
- Respecto a cómo empezar, tenemos dos sugerencias:
- Empieza por el principio, por tu infancia, contando sobre tus primeros recuerdos, y ve avanzando sobre la línea temporal de tu vida.
- Lee memorias. Hay muchas autobiografías interesantes que, además de entretenerte y enseñarte cosas, podrán darte algunas ideas sobre cómo encarar esta nutritiva tarea.