El corcho se produce a partir de la corteza del alcornoque, un árbol que crece en el Mediterráneo. Se produce en grandes plantaciones y los árboles no se dañan ni se talan durante la recolección del corcho. Por lo tanto, es un material de construcción sostenible y reciclable.
A los 25 años, un alcornoque está listo para la primera recolección. Los expertos quitan la corteza con cuidado para que el tronco quede intacto. El alcornoque tiene la capacidad única de renovarse y producir una nueva corteza cada nueve años. Como vive unos 200 años, ofrecerá unas 20 cosechas.
Colocar suelos de corcho como parqué preacabado
Si deseas colocar rápidamente tú mismo un suelo de corcho perfecto, opta por una instalación flotante y sin cola (sistema de clic), similar a los laminados de madera. Solo tienes que unir las placas y el suelo se podrá pisar inmediatamente, sin más tratamientos. Los tablones para la instalación flotante pueden ser macizos o aglomerados.
Ventajas del suelo de corcho
El suelo de corcho ofrece varias ventajas que lo hacen una opción popular en hogares y oficinas:
- Aisla térmica y acústicamente: mantiene el calor en invierno y el fresco en verano. Además, reduce el ruido, lo que lo hace ideal para espacios concurridos o apartamentos.
- Es cómodo: su estructura celular lo hace suave y flexible bajo los pies, proporcionando una superficie cómoda para caminar o estar de pie durante largos periodos. Es muy suave con las articulaciones, que normalmente sufren con los suelos duros, como los de cerámica, granito o mármol.
- Es sostenible: es un material natural y renovable, extraído sin dañar los árboles (generalmente del alcornoque). Esto lo convierte en una opción ecológica y sostenible.
- Es duradero: es muy resistente a la abrasión y al desgaste. La superficie se sella con aceite, cera o barniz. Si se lija un suelo de corcho macizo, después del sellado volverá a quedar como nuevo.
- Frena la humedad: la suberina, una mezcla compleja de ácidos grasos y alcoholes, hace que el corcho sea impermeable a líquidos y gases. Hay trozos de corcho que han permanecido muchos siglos en el agua sin pudrirse.
- Es antialérgico: el corcho es naturalmente resistente a los ácaros del polvo, el moho y otros alérgenos, lo que lo hace ideal para personas con alergias o asma.
- Es higiénico: no necesita mucho para estar limpio, basta con pasarle una mopa o aspirarlo.
paso a paso para colocar las tablas de corcho
- Prepara la superficie. Elimina cualquier resto sobre el suelo antiguo, rellena grietas y agujeros si los hay y lija las irregularidades. Si el piso está muy irregular, es posible que tengas que aplicar un compuesto nivelador. En este caso, ten en cuenta el tiempo de secado necesario.
- Una vez que la superficie esté limpia y seca, coloca una barrera a la humedad para que no se forme moho debajo del parqué de corcho. Puedes instalar también un aislamiento acústico, aunque en muchos casos las placas de corcho ya vienen con una placa aislante de corcho denso integrada.
- Coloca la primera fila de tablas del piso y usa cuñas espaciadoras para mantener una distancia suficiente con la pared. Para una instalación flotante, la distancia a las paredes debe ser de unos 10 a 15 milímetros. Esas distancia a la pared se llama junta de dilatación. De esta manera se puede amortiguar cualquier ligera dilatación debida al calor, el frío y la humedad.
- Una vez colocada la primera fila, compuesta por tablas completas, se procede al primer corte. Para ello, mide la última tabla y córtala, retando la distancia para la junta de dilatación. Para cortar parqué y tarimas de corcho es adecuada una cortadora de laminado estándar.
- Puedes comenzar la siguiente fila con la pieza restante de la primera, siempre que haya unos 30 cms de distancia hasta el final de la primera tabla de la primera fila. Lo más adecuado es que la primera pieza de la segunda fila sea aproximadamente la mitad de larga que la primera de la anterior.
- Repite estos pasos para las siguientes filas hasta la última. Cuando termines puedes quitar las cuñas espaciadoras. Ahora mide los zócalos y córtalos a la medida. Para una transición limpia en las esquinas, usa una sierra ingletadora para cortar los zócalos en un ángulo de 45 grados.
Cuidados para que el suelo esté siempre como el primer día
- Existen precauciones que debes tomar para que no se dañe tu suelo de corcho. Por ejemplo, coloca un felpudo en la entrada para que no entren piedrecitas
- Las patas de las sillas u otros muebles pueden rayones en el suelo. Por lo tanto, pégales deslizadores de fieltro o de silicona.
- Debes tener cuidado de no arrastrar muebles grandes u otros objetos pesados sobre el suelo de corcho.
- Si alguna vez derramas algo, es mejor que lo limpies inmediatamente. Por supuesto, también debes limpiar y mantener tu suelo con regularidad.