Casa sana: elige la madera adecuada para cada uso

La madera es un escudo frente a la contaminación electromagnética, hace más cálida la luz y es más higiénica que el plástico o el metal. Pero conviene conocer cada madera antes de comprarla y elegirla de bosques sostenibles.

como elegir madera adecuada

El ambiente sano y confortable que proporciona la madera, junto con las ventajas ecológicas, explican que se recupere como material de construcción.

Proliferan iniciativas como la House Habitat, que en pleno corazón de Barcelona, en el barrio de Gracia, ha levantado un edificio de madera de cinco plantas. Es el más alto de este tipo en esa ciudad, y hay muchos más proyectos similares.

La madera aporta tantas ventajas que algunos países ya se han planteado obligar por ley su utilización en porcentajes mínimos dentro de las nuevas construcciones.

La madera, un material reciclable, ecológico y saludable

Los árboles capturan dióxido de carbono (CO2), el gas que más influye sobre el cambio climático. Se calcula que un árbol absorbe alrededor de 5 kilos de CO2 al año, ya que en torno al 50% de su peso es carbono. Cuando muere, si la madera no se usa, ese carbono vuelve a la atmósfera.

Sin embargo, la madera transformada en un producto duradero retiene el dióxido de carbono. La larga durabilidad y resistencia de los muebles y objetos de madera y su fácil reciclaje posterior permiten que no se convierta fácilmente en un residuo productor de CO2.

"Tiene un bajo consumo energético en su transformación, no genera residuos si se convierte en biomasa, es reciclable y biodegradable", explica Joan Vilà Augé, profesor de la Especialidad de la Madera y asesor de House Habitat.

Qué madera elegir en cada caso

Más allá de la estructura de la vivienda, aún poco habitual en España, podemos aprovechar las cualidades beneficiosas de la madera rodeándonos de objetos, muebles, suelos o paredes de este material orgánico.

Eso sí, debemos elegir madera proveniente de bosques sostenibles certificados o de productos reciclados, porque la tala ilegal desforesta el planeta y compromete el futuro de las próximas generaciones. El sello más exigente a la hora de certificar si una madera es sostenible o no es el FSC.

Pero además debemos conocer las particularidades de cada madera, pues no todas las maderas son igual de adecuadas para todo. Algunas se adaptan mejor a unos usos que a otros.

  1. Pino: Las especies Pinus nigra y Pinus pinaster están muy extendidas en España y son un buen recurso para promover el desarrollo local. Suele usarse como madera estructural, en carpintería y mobiliario de interior. No es adecuada para objetos de cocina porque es muy porosa.
  2. Roble: Fuerte, elástica y versátil, se emplea para elaborar mobiliario y carpintería interior. Es una especie de crecimiento lento, por lo que almacena CO2 durante mucho más tiempo y es preferible a las de crecimiento rápido.
  3. Abedul: Se usa sobre todo para mobiliario y revestimientos de interior, tableros y chapas decorativas.
  4. Haya: Resistente y dura, se emplea en decoración de interiores, parqué, escaleras y muebles. No desprende sabor y es idónea para fabricar juguetes y accesorios de cocina.
  5. Nogal: Resistente y muy valorada por su estética, es una de las maderas más apreciadas en ebanistería y en la elaboración de muebles macizos.
  6. Caoba: Muy dura y resistente a la podredumbre y las termitas. Es una especie vulnerable, y si no dispone de sello FSC puede proceder de talas ilegales o de contrabando.
  7. Cerezo: Con el tiempo tiende a sufrir alteraciones de color que la llevan a adquirir una tonalidad rojo caoba. Se utiliza en tableros contrachapados, tarimas y parqué.
  8. Teca: Sólida, densa y muy fácil de manejar. Gracias a la impermeabilidad que le proporciona su aceite, aguanta muy bien la humedad, por lo que resulta ideal para muebles de exterior. Gran parte de la teca sin sello FSC procede de plantaciones involucradas en conflictos sociales y ambientales.

¿Deseas dejar de recibir las noticias más destacadas de cuerpomente?