Cultivar tus propios alimentos es una forma económica y ecológica de comer más sano y conectar con la naturaleza. Tú decides y controlas qué lleva tu comida.
Esto no es un privilegio exclusivo de quien tiene una gran casa de campo o espacio en el jardín. Puedes cultivar tanto dentro de casa como en una terraza, balconcito o patio interior.
Hay huertos urbanos para todos los gustos y tamaños y con estos complementos lo tienes mucho más fácil.