Los meses de invierno, la calefacción se convierte en uno de los mayores gastos de muchos hogares. Y reducir este gasto, en una de sus principales preocupaciones.
Una calefacción más eficiente no sólo tendrá un impacto positivo en nuestra factura, también supondrá un gasto energético y un impacto medioambiental mucho menor.
Cómo ahorrar en calefacción
Para ahorrar en calefacción y abaratar tu factura de la luz, sigue estos consejos.
1. Mejora la eficiencia de los radiadores
Para aprovechar el poder calorífico de nuestros radiadores, no debemos taparlos ni colocar nigún objeto encima, ya que esto entorpecería la circulación de aire.
Y ya para nota: colocar unos paneles reflectantes detrás de nuestros radiadores nos permitirá ahorrar hasta un 20% de energía.
2. Apaga la calefacción durante el día
El mito de que apagar la calefacción es más caro que dejarla encendida todo el día no es más que, efectivamente, un mito. Te sale más a cuenta encenderla solo cuando vayas a estar en casa y la necesites. Haberla tenido apagada no te supondrá un gasto extra a la hora de devolver la casa a una temperatura óptima.
Si quieres que la casa esté caliente cuando llegues, te recomendamos que te subas al carro de las nuevas tecnologías con las opciones que te comentamos en el punto siguiente.
3. Programa la calefacción
Algunas empresas están generando la tecnología necesaria para programar la calefacción sin estar en casa. Mediante apps y conectando nuestra calefacción a la red podemos establecer unos horarios y climatizar nuestro hogar aunque no estemos en él. Esto nos permite, por ejemplo, detectar las horas a las que la electricidad es más cara para reducir nuestro consumo o poder calentar la casa antes de llegar, para no tener que dejar la calefacción encendida todo el día.
4. Detecta los puntos fríos
De nuevo gracias a la tecnología actual podemos obtener una termografía de nuestro hogar y descubrir los puntos más fríos. Conociendo la causa de estos puntos fríos , podremos ponerle remedio.
Esto es básicamente una auditoría energética de la casa, que puede servirte también en muchos otros aspectos que te ayudarán a mejorar tu bienestar en casa.
5. Revisa los cerramientos de la casa
El 30% del aire caliente se escapa a través de los cerramientos de la casa; las puertas, ventanas y conductos de ventilación. Si queremos aislar térmicamente nuestro hogar de forma más eficiente, deberemos plantearnos cambiar o mejorar los cerramientos que estén causando que nuestra casa se enfríe más rápidamente.
Un ejemplo claro son las ventanas. Para ser eficaces contra el frío deberemos tener ventanas de doble vidrio. El tipo de vidrio más efectivo es el bajo emisivo, que incluye una capa de óxido de plata para contener la pérdida de calor.
6. El rojo es tu aliado
Los tonos rojos en la decoración y como parte del color de la habitación contribuyen a aumentar la temperatura corporal y el ritmo cardíaco.