Producir un kilo de aguacates requiere entre 600 y 1.000 litros de agua. Estas cifras lo convierten en un lujo desde el punto de vista de la sostenibilidad, sobre todo si se produce en regiones donde el agua no sobra. Pero el aguacate es tan apreciado, hay tanta demanda, que los cultivos no dejan de extenderse.

En México, patria de este fruto increíble, el crimen organizado se ha fijado en el "oro verde" y extorsiona a los propietarios de los cultivos, que, por otra parte, talan bosques valiosos para hacer crecer sus plantaciones.

En España, el aguacate se cultiva en Málaga, especialmente en la comarca de la Axarquía, Granada y Canarias porque necesita un clima subtropical.

También en Huelva, Cádiz, Almería, Murcia, Alicante y Valencia. Su temporada va de enero a junio, que es cuando encontramos aguacates nacionales en el mercado. El resto del año proceden de los países tropicales, con lo que al consumo de agua hay que sumar el impaco ambiental y en emisiones de CO2 del transporte. Por eso es buena idea conocer los alimentos que pueden sustituir al aguacuate.

7 alimentos con propiedades similares al aguacate

Por supuesto, no hay nada malo en comprar un aguacate de cultivo de proximidad, sobre todo si es de producción ecológica certificada. Pero cuando esto no sea posible, podemos elegir alimentos que no tienen nada que envidiarle, sobre todo si se combinan. La mayoría de estos alimentos tienen la ventaja de cultivarse a nivel regional.

1. Nueces

Las nueces contienen ácidos grasos insaturados saludables, incluidos los omega-3, que apenas están presentes en el aguacate. También aporta vitamina E y vitaminas del grupo B, así como zinc, magnesio, hierro y otros minerales.

En lugar del aguacate, puedes usar nueces para tu ensalada o hacer una mantequilla de nueces para untar el pan. Las semillas de girasol y de calabaza también son alternativas saludables.

Además, el cultivo de los nogales es sostenible. En Galicia, Asturias, León, Santander, La Rioja y Navarra, los árboles ni siquiera necesitan riego, porque las raíces llegan hasta el agua acumulada en el subsuelo.

2. Castañas

En otoño puedes recurrir a las castañas con frecuencia. Contienen hidratos de carbono de absorción lenta, minerales e inulina con efecto prebiótico.

Además de las castañas enteras puedes utilizar todo el año su harina para preparar crepes, cremas dulces, tartas, rosquillas, buñuelos, bizcochos, madalenas, galletas, masa quebrada, panes dulces… con la ventaja para los celiacos de que no contiene gluten.

3. Aceitunas

Las aceitunas contienen los mismos ácidos grasos monoinsaturados saludables que el aguacate, antioxidantes, vitaminas B2, B9 (ácido fólico) y E, así como betacaroteno. Además, las aceitunas contienen casi tanto calcio como la leche. También aportan cobre y hierro.

Además de las aceitunas encurtidas enteras o sin hueso, puedes consumirlas en forma de olivada. Puedes hacer puré de aceitunas verdes o negras, que puedes enriquecer con albahaca, tomates desecados, alcaparras, ajo, etc.

4. Legumbres

Las alubias rojas no solo son muy saludables, también se pueden cultivar en el jardín. Entonces, ¿por qué no agregar alubias cocidas a la ensalada con más frecuencia o usarlas para hacer un un delicioso humus? Las alubias, ya sean rojas, negras, blancas o pintas, contienen proteínas, fibra, vitaminas del grupo B, minerales como el calcio o el hierro en abundancia. Lo mismo se aplica a las lentejas y los garbanzos.

5. Semillas de lino

Las semillas de lino gozan de una buena reputación, especialmente debido a su contenido de valiosos ácidos grasos omega-3. Pero también contienen muchas vitaminas (sobre todo del grupo B) y minerales esenciales.

Las semillas de lino también se producen en España, pero algunas provienen del extranjero, por ejemplo, Canadá o China, lo que a su vez tiene un impacto negativo en el balance de CO2. Busca, si es posible, variedades nacionales y de cultivo ecológico.

6. Bayas

Especialmente en verano puedes usar bayas locales. Son ricas en vitaminas, antioxidantes, calcio, magnesio, hierro y otros compuestos saludables. Una mezcla de frutos rojos en el muesli o como postre es una buena alternativa.

Fuera de temporada se pueden conseguir congeladas, pero de esta manera su impacto ambiental es mucho mayor. Una manera sencilla de tener bayas a mano y baratas es cultivarlas tu misma en el balcón o la terraza.

7. Remolacha

La remolacha está disponible todo el año en nuestro país. Es una excelente fuente de ácido fólico, así como de vitamina C, potasio, magnesio, hierro y yodo. Tambien contiene cantidades apreciables de vitaminas B1, B2, B3 y B6.

Probablemente lo que te frena ante una remolacha es que no estás acostumbrada a prepararla. Virginia García te ofrece un montón de ideas en su blog.