¿Cuánto tiempo hace que no habitas este planeta?
Que no pones los talones sobre la hierba mojada.
¿Cuánto tiempo hace que no le dices a tu madre algo bueno?
Que llegas a su casa o a su habitación sin avisar y le llevas un ramo de margaritas o un taladro y le quitas lo que esté haciendo de las manos y la sientas y la miras y le das las gracias por haberte alimentado cuando tú no podías hacerlo.
¿Cuánto tiempo hace que no escuchas a tu hijo?
Que al llevarle al colegio te pasas la salida y haces un trayecto con él hasta el mar y le dices que te sientes orgulloso porque está buscando su lugar en el mundo con lo complicado que es el mundo y que no tenga miedo porque siempre vas a apoyarle en todas y cada una de las decisiones que tome.
¿Cuánto tiempo hace que no sonríes a un desconocido?
Que no te cruzas con cualquiera y te das cuenta de que tú eres cualquiera para el otro y te maravillas de estar aquí y ahora compartiendo instante y realidad.
¿Cuánto tiempo hace que no follas mirando a los ojos?
Que no empiezas chupando el dedo gordo de un pie y acabas acompañado, saliendo disparado hacia arriba y hacia después a la velocidad de la luz.
¿Cuánto tiempo hace que no te quieres?
Que no te pones desnuda delante de un espejo y te miras y no te odias y te dices qué bien, menos mal que todavía tengo piel para avisarme del dolor y párpados para que no se me queden sin vida las córneas y pelos en la nariz para que no se me introduzcan polillas que me lleguen al corazón.
¿Cuánto tiempo hace que no escribes de lo que te pasa?
Que no callas la actualidad, apagas el móvil, bajas los plomos, te duchas y te peinas como cuando eras un niño bueno o una niña hiperactiva y te sientas delante del blanco más temible, tú y él y empiezas: Me siento solo.
¿Cuánto tiempo hace que no te perdonas?
Que no lees un libro y te das cuenta de que todos somos lo mismo y entonces te dices que tú no tienes la culpa y que puedes hacer las cosas mucho mejor que Perry Smith y Dick Hickock o que la reportera húngara, si quieres.
¿Cuánto tiempo hace que no cometes una estupidez?
Que no dices que sí a un viaje sin hoteles confirmados, que no tocas un portero de madrugada y sales corriendo, que no sales sin peinar de marcha, que dices que no a más dinero por muchas más horas.
Lo olvidamos.
Olvidamos que cada día la Tierra nos da la luz.
Olvidamos que cada día regresamos del sueño.
A un lugar con agua y aire.
Todos.
Menos algunos que ya no lo hacen.
Cada día, una nueva oportunidad.
Para validar la vida.
Mientras dure.
Dime tú.
¿Cuánto tiempo crees que tienes?