Puedes elaborar esta leche con otros frutos secos o semillas, como almendras, nueces, semillas de girasol, calabaza, cáñamo, sésamo… Hay muchas posibilidades.
Mézclala con frutas como fresa o piña, por ejemplo, para hacer un batido, o condiméntala con lo que quieras. Le sienta muy bien un poco de cacao o de algarroba…
Consérvala en una botella de vidrio, en la nevera. Aguantará dos o tres días, y un poco más si la remueves de vez en cuando.