Esta hortaliza, que alegra los platos con su sabor picante y su textura crujiente, posee un valioso efecto diurético y depurativo. Esto se debe en parte a su riqueza en sustancias antioxidantes que, además, potencian el sistema inmunitario.
Hay diferentes variedades de rábanos. Para esta receta se utilizan los rábanos blancos asiáticos, que tienen forma cilíndrica y alargada, pulpa blanca y un sabor suave. Además, colaboran en la depuración del cuerpo y en la eliminación de mucosidades y cálculos renales. A este grupo pertenece el daikon, que se cultiva en el sudeste asiático y en Japón.
Se puede sustituir la manzana por tacos de tofu y rebozarlos igualmente.
Ingredientes para 4 personas:
- 2 puerros, lavados y troceados
- 1 cebolla, pelada y troceada
- 400 g de rábano blanco, lavado y troceado
- 400 ml de caldo vegetal o agua
- 2 manzanas, peladas y cortadas a dados
- 2 cucharadas de almidón de maíz ("maicena")
- Aceite de oliva virgen
- Una cucharada de germinados de rábano rojo
Preparación (20 minutos + 25 de cocción):
- En una cazuela sofríe la cebolla, añade el puerro y, cuando se ablande, agrega los rábanos. Minutos después cúbrelos con el caldo.
- Hiérvelo unos diez minutos y tritúralo. Si hace falta, pásalo por un colador chino y vuelve a triturarlo con un par de cucharadas de aceite de oliva para que emulsione y quede bien ligado.
- Pasa los dados de manzana por almidón de maíz y fríelos en abundante aceite caliente.
- Sirve la crema con la manzana y los germinados.
Qué te aporta una ración:
259 calorías, 32 g de hidratos de carbono, 7 g de proteínas y 11 g de grasas.