Durante el embarazo, alimentación más saludable y nutritiva
Somos padres primerizos y queremos compartir contigo nuestra experiencia con la alimentación durante el embarazo. Aunque, a decir verdad, el compromiso no ha de comenzar justo cuando descubres que estás embarazada, sino antes, en el mismo momento en el que decides con tu pareja emprender la fascinante y transformadora aventura de traer un nuevo ser a este planeta.
Está claro que las necesidades alimenticias se incrementan durante el embarazo. Tu cuerpo necesita durante ese periodo más vitaminas, minerales, hidratos de carbono, proteínas y grasas.
Para estar segura de que estás proveyendo a tu organismo de lo que necesita, tienes que hacerte amiga de alimentos frescos y de calidad, como vegetales de hoja verde, frutas, verduras, germinados, algas, semillas, frutos secos, aceites y grasas saludables de origen vegetal y de primera presión en frío, hongos, cereales integrales y legumbres. A ser posible ecológicos.
Las necesidades no cambian sustancialmente durante el embarazo, salvo en el primer trimestre, periodo en el que el embrión se convierte en un feto (semana 10). Durante ese tiempo, necesitarás aumentar la cantidad de proteínas e hidratos de carbono.
Minerales como el hierro, el yodo, el calcio o vitaminas como el ácido fólico (B9) son muy importantes a lo largo de todo el embarazo. Asegúrate de que cuentas con buenas reservas de todo ello.
¡Disfruta el momento!
Nuestra recomendación es escuchar los antojos y ceder ante ellos… ¡sobre todo si son antojos de alimentos saludables! Si tienes antojos de alimentos procesados y ricos en grasas saturadas, azúcares y sal, intenta reducirlos todo lo que puedas.
El embarazo puede ser una montaña rusa de emociones y sensaciones. Es vital escucharte y darte amor. Vibrar positivamente, hablarle, cantarle, establecer comunicación con él o ella.
Aparte de tu alimentación, es importante para ti hacer ejercicio suave, como caminar. Practicar yoga puede ayudarte además a mantener la paz y calma interior. Otórgate el tiempo y el espacio para ir asimilando los cambios que estás viviendo interna y externamente.
Y sobre todo, disfrútalo y vívelo con amor.