Es sabido que los alimentos ejercen una influencia directa sobre la salud, y por ello la industria de la salud ha creado y sigue creando e investigando sustancias que añadidas a la alimentación puedan ejercer un efecto de medicamento.

No todos los suplementos alimenticios son inocuos, aunque la mayoría reciben la consideración legal de alimento y generalmente tienen escasos o nulos efectos secundarios.

Como bien dice su nombre, estas sustancias son en realidad alimentos, productos extraídos de ellos o bien sustancias que se recomiendan para mejorar la nutrición.

Sin embargo el consumo de suplementos no tiene por qué mejorar la salud por el mero hecho de tomarlos, sino que se debe complementar con cambios de otra índole en la dieta o en los hábitos de vida, o incluso acudiendo al médico para que prescriba un medicamento si la enfermedad lo requiere.

Presentamos a continuación 40 sustancias de probada eficacia.

Suplementos nutricionales para el sistema nervioso

Ansiedad, irritabilidad, hiperactividad, estrés, migrañas, insomnio y problemas para concentrarse son algunas de las manifestaciones más comunes de trastornos nerviosos que toda persona padece en algún momento de su vida.

Lo sensato es subsanar sus posibles causas, aunque ciertos suplementos pueden ser útiles.

Algas azules

Las algas azules crecen usualmente en lagos y ríos tropicales con aguas alcalinas, y entre ellas se encuentran las del tipo espirulinay otras bastante diferentes, como las algas Klamath, una especie endémica del lago del mismo nombre, en Oregón (Estados Unidos).

Si no han sido cultivadas en aguas puras, estas algas pueden concentrar metales pesados, por lo que debe constar su origen adecuado.

Una vez secas contienen hasta un 65% de proteínas de buena calidad, y se recomiendan como complemento de las dietas de reducción de peso y en el tratamiento complementario de la hiperactividad infantil o síndrome de déficit de atención e hiperactividad.

Dosis recomendada:

  • Se suelen administrar 3 gramos antes de las tres comidas.

Astaxantina

Se trata de un pigmento rojizo de la familia de los betacarotenos, utilizado especialmente en el tratamiento de la degeneración macular o pérdida de visión típica de las personas mayores.

También se ha recomendado como tratamiento complementario del Alzheimer, Parkinson, elevación del colesterol y para aplicar directamente sobre las quemaduras solares. Se suele combinar con otras sustancias como la luteína.

Dosis recomendada:

  • No existe una dosis establecida, aunque suelen administrarse 50-100 mg.

Carnitina

Conocida científicamente como L-carnitina o acetil-L-carnitina, se recomienda para mejorar la memoria en personas mayores y también en la parálisis facial, secuelas de infarto o embolismo cerebral, y en el síndrome de Down.

Es una sustancia producida naturalmente por las mitocondrias de nuestras células. También incrementa la producción de líquido seminal y posiblemente tiene una acción estimulante de la libido.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual es de 500 mg/día.

Fosfatidilserina

La fosfatidilserina es un fosfolípido de absorción rápida parecido estructuralmente a la lecitina de soja (o fosfatidilcolina), que estimula la liberación de varios neurotransmisores, tales como la acetilcolina y la dopamina.

Se utiliza en la prevención y tratamiento de las pérdidas de memoria asociadas a la edad, y también como complemento en las demencias vasculares o de tipo Alzheimer, enfermedad de Parkinson o depresión.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual es de 100 mg dos o tres veces al día.

Triptófano

El 5-HTP o hidroxitriptófano es un aminoácido, un suplemento muy simple, que tiene la capacidad de convertirse en serotonina, un neurotransmisor con efecto notablemente antidepresivo, antiansioso, que favorece la concentración y además combate el insomnio.

Se ha recomendado asimismo para atenuar las molestias del "jet lag" que se sufre en los vuelos intercontinentales.

Dosis recomendada:

  • La dosis es de 150-300 mg diarios.

Suplementos para el sistema digestivo

El estilo de vida actual, a menudo ajetreado si no frenético, la tendencia a consumir comida preparada, con exceso de grasas de pobre calidad, y la incidencia de situaciones de estrés hacen que aumente la posibilidad de padecer trastornos digestivos. Ciertos suplementos pueden solucionar en parte esos problemas.

Agar-agar

Llamada a menudo "gelatina vegetal", es un extracto elaborado con algas de diferentes tipos (Gelidium, Gracilaria, Pterocladia, Ahnfeltia... ), que se obtiene poniéndolas en maceración con agua, filtrándolas y evaporando la humedad. En la práctica se trata de una fibra vegetal soluble.

Está compuesto de dos polisacáridos, agarosa y agaropectina, sin valor nutritivo ya que no se absorben en el tubo intestinal. Se recomienda como laxante suave y para aliviar los síntomas irritativos del intestino.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual son 5-15 gramos diarios, disueltos en agua, en los alimentos, o formando gelatinas.

Alginatos

Se trata de la sal sódica de los ácidos algínicos, extraídos de algas como Laminaría digitata y Macrocystis pyrifera, ricas en ácidos manurónico y gulurónico.

Se recomienda en el tratamiento del colesterol, ya que retrasa la absorción de esta grasa en el intestino.

Se utiliza además en la industria alimentaria como espesante de alimentos.

Betaglucanos

Son polisacáridos extraídos de cereales como la avena o de diversos tipos de levaduras.

Se pueden clasificar entre los suplementos probióticos, ya que mejoran la flora intestinal, aunque se recomiendan especialmente en el tratamiento del colesterol y también en las dietas de reducción de peso.

Algunos estudios indican que los betaglucanos pueden ejercer cierto efecto protector del cáncer y estimulante inmunitario.

Dosis recomendada:

  • La dosis corriente es de 7 a 10 gramos diarios, muchas veces incluidos en alimentos dietéticos.

Bifidobacterias

Se denominan así porque tienen forma de Y, es decir, poseen una cola bífida, como la lengua de las serpientes. De hecho, se parecen bastante a los lactobacilos y muchos suplementos contienen ambos y ayudan a regenerar la flora intestinal con todas las ventajas que ello comporta, esencialmente estimulando la inmunidad y mejorando la digestión.

Se utilizan en el tratamiento de las diarreas simples, infecciosas, por uso de medicamentos o por radiación, y se pueden administrar a niños pequeños. Los yogures tipo bífidus las contienen.

Dosis recomendada:

  • La dosis de bifidobacterias se calcula en su número. Una dosis efectiva incluye de mil a diez mil millones de ellas repartidas en tres o cuatro tomas diarias.

Bromelaína

Este nutracéuticose extrae de la piña tropical (planta de la familia de las bromeliáceas), especialmente de su parte central.

La piña es rica en proteasas, enzimas que ayudan a iniciar la digestión de las proteínas rompiendo sus enlaces químicos y disgregándolas en aminoácidos.

Esta misma acción hace que resulten útiles para ablandar durezas córneas, como verrugas, aplicando la piña sobre la piel.

Se suele asociar con la papaína en mezclas digestivas.

Chitosán

La quitina (chitin en inglés) es un polisacárido que tienen ciertos insectos en el caparazón y también los crustáceos, pues contribuye a formar su esqueleto exterior.

A partir de la quitina se elabora el chitosán, una sustancia que tiene la capacidad de secuestrar las grasas en el intestino, absorbiéndolas, impidiendo su absorción y facilitando su eliminación por las heces. Por ello se recomienda especialmente en las dietas de reducción de peso.

La capacidad de absorción de grasas depende de la cantidad de chitosán ingerida (puede absorber hasta cinco veces su peso en grasas), por lo que no exime al paciente de seguir una dieta pobre en grasas si desea reducir peso.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual es de 0,5 a 1 gramo antes de las comidas.

Cromo

El cromo parece potenciar la acción de la insulina, tanto si se toma como medicamento como en su forma natural.

En estudios sobre miles de diabéticos se ha observado un déficit crónico de este mineral, que es de difícil absorción y que se encuentra en cantidades algo importantes en la levadura de cerveza.

Dosis recomendada:

  • La dosis recomendada es de 50 microgramos diarios.

Fructooligosacáridos (FOS)

Son un tipo de fibra soluble compuesta de unidades de fructosa, que se encuentran en gran variedad de alimentos vegetales, como la achicoria, la alcachofa, el espárrago, el ajo, la cebolla, el puerro, el tomate o el plátano.

Se ha observado que pueden modificar la composición de la micro flora del colon. Empiezan a incluirse en muchos alimentos dietéticos, ya que mejoran la función inmunitaria, la digestión y el tránsito intestinal.

Dosis recomendada:

  • No existe una dosificación al tratarse de un producto de consumo alimentario.

Papaína

Como la bromelaína de la piña, es otra proteasa (enzima que desdobla o fragmenta las proteínas) de gran interés, extraída en este caso de la papaya. La fruta madura la contiene en una cierta cantidad, aunque la verde y su látex aún son más ricos en ella.

Se parece mucho al jugo digestivo secretado por el páncreas, por lo que se recomienda en las indigestiones de origen bajo, en las cuales se supone que interviene una disfunción de tipo biliar o pancreático. Digestiones lentas con regurgitaciones amargas, eructos e intolerancia a grasas y proteínas son una de sus indicaciones específicas.

Prebióticos

Los prebióticos son sustancias que favorecen, o sirven de alimento, a la flora bacteriana beneficiosa del organismo. Su consumo es recomendable, tanto que en muchas ocasiones se incluyen en los alimentos para potenciar sus efectos positivos.

En general, se trata de hidratos de carbono y fibra que se obtienen de diversos alimentos vegetales.

Probióticos

A diferencia de los prebióticos, los probióticos son los microorganismos en sí mismos. Existen más de cien billones de microbios en el sistema digestivo, y no todos los probióticos forman parte habitual de la flora intestinal, aunque tienen en común que estimulan la flora de fermentación y la inmunidad en general.

Polen

El polen de abejas es una mezcla de polen de flores amalgamado por fluidos secretados por las abejas, que le aportan enzimas beneficiosas.

Las abejas lo recolectan y lo depositan en una especie de bolsas que tienen en las patas. En la entrada de los panales se ubica un dispositivo que hace que se desprenda la bolita de polen al entrar el insecto.

Es muy nutritivo pero se consume en cantidades mucho menores que los alimentos corrientes. Es rico en vitaminas, minerales y carotenos. Es un suplemento muy bien tolerado, aunque no se recomienda en personas muy alérgicas.

Se recomienda como tónico y estimulante del apetito, si bien sus indicaciones son amplias: procesos alérgicos (rinitis, dermatitis), hemorragias, diarrea, alcoholismo.

Dosis recomendada:

  • Se toman de 500 mg a 5 gramos al día.

Vaina de judía

Un remedio tan simple como las vainas de la judía vulgar, secas y reducidas a polvo, es un buen diurético, aunque su utilización más habitual está en el tratamiento de la diabetes, posiblemente por su alto contenido en cromo.

Dosis recomendada:

  • La dosis común es de unos 2 gramos diarios, en forma de tisana o en polvo.

Vinagre de sidra

Se trata simplemente de sidra fermentada para obtener vinagre, como indica su nombre, una vez que el alcohol se ha transformado en ácido acético.

Se recomienda como depurativo general, en las dietas de reducción de peso (ya que reduce el apetito), hipertensión y artritis.

Dosis recomendada:

  • La cura de vinagre de sidra consiste en tomar de 100 a 200 cc diarios (un vaso) durante 6 días, conjuntamente con una dieta depurativa de reducción de peso.

Antioxidantes: los suplementos nutricionales que mejoran la inmunidad y previenen el cáncer

Un antioxidante es una molécula capaz de prevenir o enlentecer la oxidación de otra molécula.

La oxidación produce unas sustancias denominadas radicales libres (radical hidroxilo, radical superóxido... ) que lesionan los tejidos corporales, muy especialmente las paredes de las células, formadas por una doble capa de proteínas con una capa de grasa en el centro.

Son precisamente estas grasas las que se ven alteradas por la acción de los radicales libres, lo que envejece y debilita la célula, y con ello el organismo.

Las plantas y los animales han desarrollado complejos sistemas antioxidantes que les permiten mantener la vida en equilibrio.

Se ha relacionado la oxidación con la presencia de déficits inmunitarios, cáncer, enfermedades cardiovasculares y enfermedades neurodegenerativas, entre otras.

Los alimentos vegetales aportan numerosos antioxidantes, como los flavonoides y carotenoides, las vitaminas E, C, el glutatión, el ácido alfa-lipoico, etc. El efecto general de los antioxidantes es la prevención del envejecimiento celular, y pueden sumarse a la acción antioxidante propia de nuestro organismo.

Los alimentos vegetales ricos en pigmentos son en general ricos en antioxidantes. Se han identificado centenares de productos con posible acción antioxidante.

Los pigmentos de color amarillo se han relacionado con los flavonoides (del latín flavus, amarillo), mientras que los anaranjados, con los carotenoides y los azules, con las cianidinas (de cyanus, azul), aunque muchos de ellos no conservan esta relación.

Aceite de lino

El aceite de lino es rico en ácidos grasos de las series omega- 3 y omega-6, especialmente de ácido linolénico. Su contenido en ácidos omega- 3 (54%) no tiene parangón en el reino vegetal, superando claramente a la nuez.

Se trata de un aceite comestible, siempre que esté bien extraído y exento de ácido erúcico. El método Kousmine lo recomienda como inmunomodulador y para reequilibrar el contenido graso de nuestro cuerpo.

Dosis recomendada:

  • Se consume como un aceite normal, aunque durante intervalos cortos de tiempo, repitiéndolos de forma periódica. Sus efectos se notan a largo plazo.

Betacaroteno

La vitamina A está formada por dos moléculas de betacaroteno, pero este último, a diferencia de la vitamina, no presenta ningún riesgo de acumulación ni de toxicidad importante, si bien, al ser un pigmento, dosis muy elevadas podrían colorear la piel de amarillo o anaranjado.

Está presente, por ejemplo, en el jugo de zanahoria, aunque muchas frutas, verduras, semillas o aceites lo contienen.

Es un buen antioxidante recomendado en la prevención de ciertos tipos de cáncer, cataratas, afecciones cardiovasculares, colesterol, psoriasis o infertilidad. Se combina muchas veces con vitamina A y E.

Dosis recomendada:

  • La dosis es de 30 a 200 mg al día.

Coenzima Q10

El cuerpo humano produce de forma natural esta coenzima, cuyos niveles disminuyen con la edad y son bajos en pacientes con enfermedades crónicas como afecciones cardiacas, distrofias musculares, enfermedad de Parkinson, cáncer, diabetes y sida.

Los niveles de coenzima Ql0 en el cuerpo se pueden incrementar ingiriendo suplementos. Se recomienda especialmente para mejorar la función del corazón.

Dosis recomendada:

  • La dosis diaria es de 50 a 1.200 mg.

Germanio

Es un elemento poco frecuente en la naturaleza, y se ha observado que tiene un intenso poder antioxidante. Algún estudio indica que protege de los efectos nocivos de la radiación.

No tiene valor nutricional y en algunos países, por el contrario, se ha considerado que puede tener efectos secundarios nocivos. Dosis pequeñas parecen no ser perjudiciales para la salud y en cambio pueden estimular el sistema inmunitario y prevenir la aparición del cáncer.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual es de 1 mg al día.

Licopeno

Abunda en el tomate pero forma parte del pigmento rojo de la familia de los carotenoides que contienen otros alimentos: sandía, papaya, pimientos, escaramujos o pomelo rosado.

Se ha observado que ejerce un efecto netamente beneficioso sobre la próstata (hiperplasia o cáncer de próstata) aunque también es útil en las enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y osteoporosis.

Se sabe además que el licopeno se hace más biodisponible cuando se calienta y se mezcla con grasas, de manera que la salsa de tomate es incluso mejor fuente de licopeno que el tomate en ensalada.

Dosis recomendada:

  • La dosis diaria es de 30-50 mg.

Pycnogenol

Este suplemento se extrae de la corteza del pino de las Landas (Pinus pinas ter).

Tiene un notable poder antioxidante (por su riqueza en bioflavonoides), antialérgico y antiinflamatorio, y se recomienda en enfermedades del corazón, ya que parece reducir la agregación de las plaquetas y con ello el riesgo de trombosis.

Dosis recomendada:

  • La dosificación diaria es de unos 50 mg.

Complementos alimenticios para el dolor articular y el reúma

El dolor en las articulaciones, el dolor de espalda, el reúma, la gota y los problemas de osteoporosis pueden contrarrestarse tomando ciertos suplementos.

Betasitosterol

Químicamente es el 24-etil-colesterol, un fitosterol extraído de varios vegetales, ya que lo contienen frutas, verduras, frutos secos y semillas.

Aunque sus indicaciones son numerosas, la principal es el tratamiento del prostatismo o hiperplasia benigna de próstata.

Se añade a las margarinas por su efecto reductor del colesterol, sobre el que ejerce un efecto de inhibición competitiva, disminuyendo el colesterol LDL (malo) y el colesterol total.

Dosis recomendada:

  • Se toma en dosis de hasta 500 mg diarios repartidos en tres tomas.

Cartílago de tiburón

La proteína extraída del cartílago de tiburón puede ser de utilidad en el tratamiento preventivo de la artritis y la artrosis, al ser rica en principios formadores de cartílago.

Se ha postulado su acción anticancerosa (con la afirmación de que los tiburones no padecen cáncer, pero eso no es cierto, pues se han observado más de 40 tipos diferentes de cáncer en tiburones) y de que regula la angiogénesis o formación de nuevos capilares y vasos. Estudios clínicos ponen en duda estas últimas afirmaciones.

Dosis recomendada:

  • La dosis es de 500 a 1.000 mg diarios.

Condroitín sulfato

Esta sustancia forma parte de una larga proteína (proteoglicano) que le da elasticidad al cartílago articular. También previene que enzimas del organismo destruyan esa sustancia que recubre y protege las articulaciones. Suele extraerse de animales marinos.

Dosis recomendada:

• La dosis habitual es de un gramo diario.

Dolomita

Se trata de una roca, gestada bajo el mar y compuesta principalmente de carbonatos de calcio y magnesio de origen orgánico. Se recomienda sobre todo en el tratamiento de la osteoporosis al presentar un buen equilibrio entre esos minerales. Tiene además una discreta acción sedante.

Dosis recomendada:

  • La dosis habitual es de 500 mg a 1 gramo diario.

Glucosamina

Se encuentra en estado natural en el cuerpo humano, pues es una forma de aminosacárido que tiene un papel muy importante en la formación y reparación del cartílago articular.

Dosis recomendada:

  • La dosis media es de 1 gramo diario.

Luteína

Es un potente antioxidante de la familia de los carotenoides (se conocen más de 600 carotenoides diferentes) que puede ayudar a prevenir la degeneración macular, la causa más normal de pérdida de visión en la tercera edad.

Está presente en los alimentos, especialmente en las verduras de hoja verde o en la yema de huevo. Se suele asociar con zeaxantina, vitamina E y carotenos, así como con preparaciones multivitamínicas y minerales.

Dosis recomendada:

  • La dosis diaria es de unos 5 mg.

Magnesio

El magnesio es un remedio clásico; muy conocido e inocuo, excepto en personas con afecciones renales graves.

Ayuda a recalcificar los huesos al facilitar la absorción de calcio y además ejerce una acción relajante muscular. Por otra parte, es un relajante nervioso y facilita la evacuación en caso de estreñimiento.

Se recomienda en las afecciones osteoarticulares dolorosas en las que interviene una descalcificación o una contractura muscular -que son prácticamente todas-y como indicación especial en la fibromialgia, en la que obtiene con cierta frecuencia unos resultados interesantes.

Una dieta convencional es deficitaria en magnesio, por lo que su suplementación ayuda en general a reequilibrar este déficit.

Dosis recomendada:

  • La dosis es de 2 a 10 gramos diarios de carbonato o sulfato de magnesio, aunque otras sales también sirven.

Suplementos para regular el colesterol y prevenir enfermedades cardiovasculares

Aparte de cuidar las grasas de la dieta y hacer ejercicio de forma regular, tomar determinados suplementos puede mejorar los niveles de colesterol. La lecitina de soja, acaso el más popular, tiene ahora buenos competidores.

Levadura de arroz rojo

El microorganismo Monascus purpureus contiene monacolinas, un complejo grupo de sustancias entre las que destacan pequeñas cantidades de una estatina, denominada lovastatina, que es el fármaco más utilizado en la medicina ortodoxa para reducir el colesterol; de hecho, las estatinas farmacéuticas se extraen de esta levadura.

También posee ácido alfa-lipoico, que contribuye a eliminar el colesterol LDL y a reducir la agregación plaquetaria.

El uso de esta levadura como "tonificante sanguíneo" en China data de la dinastía Tang, en el siglo IX.

Dosis recomendada:

  • De medio a un gramo de levadura al día.

Policosanol

Se extrae de la caña de azúcar y fue descubierto por investigadores cubanos.

Se sabe que los policosanoles inhiben la enzima hidroxipropilglutaril coenzima A reductasa, con un efecto reductor del colesterol y de los triglicéridos.

Secundariamente también se recomienda como estimulante sexual y de la libido.

Dosis recomendada:

  • De 10 a 20 mg al día.

Resveratrol

El trans-resveratrol es una de las sustancias de la familia de las fitoalexinas, que abundan en el hollejo y las pepitas de la uva, a la que protegen del ataque de insectos y hongos.

Se encuentra también en el mosto (la forma más sana de consumirlo) y en el vino tinto, que posee entre 0,2 y 5,8 mg por botella, lo que resulta insuficiente para justificar su ingesta por motivos de salud. También lo contienen las nueces en menor cantidad.

Presenta propiedades cardioprotectoras, antioxidantes y preventivas del cáncer. En el proceso de fermentación del mosto se produce y se hace biodisponible para el cuerpo humano. Se recomienda en la prevención de la cardiopatía coronaria, el infarto de miocardio y la aterosclerosis.

Dosis recomendada:

  • 50 mg al día.

Suplementos para algunos problemas de la mujer

Los trastornos con un componente hormonal que suelen aquejar a las mujeres pueden ser corregidos con ayuda de algunos suplementos caracterizados por su riqueza en estrógenos vegetales o en ciertos ácidos grasos.

Aceite de borraja

El aceite de borraja contiene ácidos grasos poliinsaturados, sobre todo de la serie omega-6, con hasta un 30% más de ácido gammalinolénico que el aceite de prímula.

Se recomienda en el tratamiento de la artritis reumatoidea, eccema atópico y eccemas de repetición, en la prevención del síndrome premenstrual y de los síntomas de la menopausia, como preventivo de la angina de pecho, del infarto y de los niveles elevados de colesterol, y como antiinflamatorio en general.

Dosis recomendada:

  • Se prescriben dosis de hasta 1 gramo diario durante 4 a 6 meses, aunque no se recomiendan tratamientos más prolongados sin descansar.

Aceite de prímula

También denominado aceite de onagra, ha sido utilizado desde 1 930 en el tratamiento del eccema, posiblemente por su demostrada acción antiinflamatoria, aunque su recomendación más conocida está en afecciones ginecológicas, como síndrome premenstrual, dolores de pechos y menopausia.

Su acción se atribuye a un ácido graso DHGLA (ácido dihomogammalinolénico), del que contiene hasta un 10%.

Dosis recomendada:

  • De 500 a 1.000 mg diarios, durante unas quince semanas o más.

Fitoestrógenos

Los estrógenos vegetales tienen una actividad parecida a las hormonas sexuales humanas, aunque por norma general son antagonistas de los estrógenos.

Los más conocidos son las isoflavonas de soja (genisteína, daidzeína), si bien también se han encontrado en el trébol, sésamo, cacahuete, alfalfa, guisante...

Se utilizan en la prevención del cáncer de mama o de próstata, y en los síntomas ginecológicos de tipo hormonal asociados a la menopausia o el síndrome premenstrual.

Tienen escasos efectos secundarios y se pueden encontrar en cápsulas o en muchos productos alimentarios. como la leche de soja y sus derivados.

La utilidad de los ácidos grasos insaturados

En una dieta saludable los ácidos grasos saturados, propios de la leche y sus derivados, la carne, el huevo y los embutidos, deben estar en minoría frente a los insaturados de los pescados, los frutos secos y el aceite de oliva.

  • Un ácido graso poliinsaturado es el que tiene dos o más dobles enlaces químicos.
    • Los omega-3, como el eicosapentanoico (EPA), abundan en los animales marinos. Los ácidos omega-3 disminuyen la agregación de las plaquetas, reducen la inflamación, rebajan el colesterol y se han recomendado en la prevención del infarto, la trombosis, la dislipemia, la artritis reumatoidea y el cáncer. El consumo de aceite de semillas de lino o de suplementos ricos en EPA puede ayudar a conseguir estos objetivos.
    • Los ácidos omega-6 más conocidos son el dihomogammal inolénico (OHGLA), docosahexanoico (DHA) y alfalinolénico (ALA). Son usualmente de origen vegetal y se han utilizado desde hace siete u ocho décadas en el tratamiento del eccema, al tener cierto efecto antialérgico aplicados tópicamente. Se recomiendan además en afecciones ginecológicas como síndrome premenstrual, menopausia o dolor de senos. Ejercen, por otra parte, una acción antiinflamatoria recomendada en casos de artritis y artrosis.
  • Los ácidos grasos monoinsaturados tienen un único doble enlace y forman la familia omega-9. El más conocido es el ácido oleico, propio del aceite de oliva. Tienen menor significación como suplementos, aunque muchas fórmulas de ácidos grasos también empiezan a incluirlos.

La mayoría de estos ácidos son muy inestables y en contacto con el aire se oxidan y se enrancian, por lo que la frescura y la forma de conservación resultan esenciales.

Los aceites deben ser puros, sin diluir, envasados en ambientes sin aire ni oxígeno, al abrigo de la luz, con fecha de caducidad no muy prolongada y conservados en óptimas condiciones de humedad y temperatura, pues todos estos factores pueden hacer que pierdan eficacia.

Levadura de cerveza para la piel

Las levaduras que se emplean para fabricar la cerveza son de la especie Saccharomyces cerevisiae y suelen venderse secas, aunque existen preparaciones líquidas. Es muy rica en vitaminas y vitaminoides del grupo B y en proteínas (48%).

Se considera un remedio ancestral, recomendado en el tratamiento del acné, forúnculos y alteraciones seborreicas de la piel. Otras indicaciones incluyen el síndrome premenstrual, inapetencia, diarrea y diabetes.

Al tratarse de un ser vivo, la levadura de cerveza reduce el crecimiento de otras especies patógenas en el intestino. No se recomienda su uso en pacientes con colitis ulcerosa, que puede empeorar.

Dosis recomendada:

  • Se toman 5 gramos al día (1 cucharadita de café colmada) de levadura seca.

Libros sobre complementos nutricionales

  • Nutricéuticos; Arthur J. Roberts, Mary O'Brien y Genell Subak-Sharpe. Ed. Robinbook (obra en dos volúmenes)
  • La nueva supernutrición; Richard A. Passwater. Ed. Tutor
  • El método Kousmine; Asociación Médica Kousmine Ed. Urano