Las algas han pasado a ser parte de nuestra dieta y si aún no te has hecho con ellas, aquí vas a aprender por qué ya tendrías que disfrutar de estos alimentos tan especiales.

En Occidente no hace tanto que las algas son parte de los platos, salvo excepciones como algunas zonas de costa oceánica. En Oriente, sin embargo, como en China y en Japón las algas son parte de la dieta y están consideradas varias de ellas como alimentos medicinales.

Existen distintos tipos de algas comestibles, en este artículo trataremos de las algas pardas entre las que destacan los géneros Laminaria, Undaria e Hizikia. Existen unos 265 géneros de algas pardas con unas 1500-2000 especies principalmente marinos. Veamos cuáles son los beneficios de las algas pardas y salgamos de dudas respecto a algunas preguntas como por ejemplo: ¿Tienen mucha sal? ¿Demasiado yodo? ¿Metales pesados tóxicos? Calma: todo tiene una explicación.

Tipos de algas pardas

Antes de entrar en tema, veamos muy brevemente que existen distintos tipos de algas, comúnmente llamadas pardas, rojas, azules, verdes… En este artículo vamos a tratar de las algas pardas pertenecientes a la clase Phaeophyta.

Entre los principales tipos de algas pardas utilizadas como alimento tenemos:

  • Laminariaspp, Sacharina spp., con el nombre común de alga kombu.

  • Undaria pinnatifida o wakame.

  • Hizikia fusiforme, también llamada hiziki o hijiki.

  • Eisenia bicyclis o arame

  • Himanthalia elongata o espagueti de mar.

Beneficios de las algas pardas

Las algas son un alimento muy interesante debido a su elevado aporte de minerales, presencia de fibra soluble e insoluble, ácidos grasos omega 3, así como por su bajo contenido calórico.

Entre los minerales, las algas aportan a nuestra dieta sodio, potasio, calcio, magnesio, manganeso, azufre, fósforo, cloro, hierro, cobre y yodo. Además aportan oligoelementos muy interesantes como son el zinc, litio, selenio, cobalto y flúor.

El aporte de fibra del tipo soluble e insoluble es una ayuda muy interesante, ya que las algas cuando están secas aportan más cantidad de fibra que alimentos como hortalizas o frutas.

Al rehidratar las algas, la fibra despliega sus acciones y beneficios en afecciones del sistema digestivo, sistema cardiovascular, en casos de sobrepeso, diabetes, hipertensión, mejoran el estado de la microbiota y facilitan el tránsito intestinal. Las algas son saciantes, calman la irritación de la mucosa gastrointestinal.

Las algas son una fuente de ácidos grasos omega 3 EPA y DHA por lo que son importantes en nuestra dieta. EPA y DHA poseen efectos beneficiosos para la salud, entre ellos minimizan el riesgo cardiovascular, participan en la modulación de la inflamación en casos como artritis, intervienen en las funciones cerebrales y bienestar ocular.

Las algas contienen pigmentos como la clorofila pero las algas pardas (o marrones) presentan pigmentos del tipo xantofilas que son las que le aportan el color marrón o pardo. Las xantofilas son los pigmentos que dan el color dorado, ocre a las hojas de los árboles en otoño.

Las algas y la sal

¿Tienen mucha sal las algas? Bien, las algas marinas viven en agua salada, por tanto aportan sal (cloruro de sodio) y lógicamente aportan sodio y cuando están secas, la sal está más “concentrada”. Por ello, las algas secas deben hidratarse y dejarse en remojo, cambiando el agua varias veces antes de su consumo.

Si al ver las algas secas notas que tienen sal, también sirve como conservante natural, como se hace con alimentos en salazón, por ello, quizá quieras cambiar más veces el agua, para retirar el exceso de sal.

Una “ventaja” es que no tenemos que añadir sal a los alimentos con los que las preparemos. Las propias algas nos sirven de aderezo.

¿Es perjudicial el yodo de las algas pardas?

Esta es una pregunta muy frecuente. El yodo es un mineral necesario para el correcto funcionamiento y desarrollo de nuestro organismo. Por lo tanto, la respuesta es que no. El yodo de las algas pardas no es perjudicial en sí mismo.

Sin embargo, en exceso, el yodo sí puede ser un problema para algunos grupos de población.

Existen estudios que apuntan a que las elevadas cantidades de yodo encontradas en las algas pardas (concretamente en el grupo de las Laminarias o kombu) podrían ser contraproducentes para ciertas personas.

Este hecho se relacionaría con que un exceso de yodo en la dieta podría afectar a la producción hormonal por parte del tiroides, e inducir una situación de hipertiroidismo.

Ahora bien, hemos de tener en cuenta, precisamente la cantidad real de algas que puedan formar parte de nuestra dieta.

Por ello, vamos a centrarnos ahora en esos grupos de población para los cuales no se recomienda comer algas pardas, sobre todo, las algas kombu (Laminaria japonica, Saccharina japonica).

Algas pardas: recomendación de consumo

Hace unos años se consideraba que en países como España el consumo de algas no era tan elevado como para considerar que pudieran ser una fuente de yodo elevado en la dieta.

No obstante, la sociedad va cambiando y se adquieren nuevos hábitos alimentarios. Como consecuencia de ello y de los estudios de seguridad, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) adaptó sus recomendaciones. Varios países, como por ejemplo, España y Francia disponen de recomendaciones respecto al consumo de algas pardas, sobre todo de kombu. Dichas recomendaciones actualizadas en 2021 por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) son:

  • No deben tomar alga kombu las personas con problemas de tiroides, o que tomen medicamentos que contengan yodo.
  • Por precaución se recomienda evitar en niños y niñas que están lógicamente en fase de crecimiento y desarrollo, así como en mujeres embarazadas y en periodo de lactancia.

Seguridad de las algas y metales pesados tóxicos

Posiblemente te preocupa el tema de los metales pesados “tóxicos”. Las algas debido a su estructura y medio de crecimiento marino pueden absorber y acumular metales pesados tóxicos como el mercurio, cadmio o plomo. Si bien el ácido algínico que contienen las algas de modo natural puede ayudar a nuestro organismo a eliminar metales pesados tóxicos, la recomendación es evitar fuentes de algas no seguras.

Somos conocedores del mal estado de las aguas oceánicas debido a la industrialización y contaminación, por ello es importante ser muy cuidadosos a la hora de adquirir algas para consumo. Y desde luego cuidar los océanos.

Como suelo decir: lee bien el etiquetado al hacer la compra. ¡Pierde tiempo en leer! y en prepararlas bien, para disfrutar de un alimento delicioso con todos sus beneficios para tu bienestar.