Eccema es una palabra genérica que indica un enrojecimiento de la piel por la inflamación de la dermis y la epidermis. Suele presentarse en zonas húmedas y pliegues, y rascarnos no facilita su alivio. Puede exteriorizarse como un área de enrojecimiento, o cuando evoluciona, presentar exudación, vesículas o pápulas.
Numerosos factores pueden empeorarlo, como el estrés, los nervios, el calor o el consumo de ciertos alimentos, como la leche de vaca, huevos, pescado, azúcar o aditivos alimentarios.
Dermatitis atópica, mucho más que un eccema
En muchos casos, el eccema es una reacción alérgica, y se puede catalogar como dermatitis atópica, bastante común en niños y bebés.
El eccema suele ceder con el tiempo, aunque algunas personas lo padecen toda la vida. En estos casos, ciertos jabones, cosméticos o prendas de vestir pueden producir un eccema de contacto.
En otros casos, son los alimentos los que pueden favorecer su aparición, o incluso la llegada de la primavera, porque las personas con piel atópica son en realidad alérgicas y tienen más riesgo de padecer asma o rinitis.
La toma de medicamentos puede producir eccemas alérgicos, entre ellos destacan los antibióticos y las medicaciones para el cáncer, pero la lista es muy, muy larga.
Tratamiento natural del eccema
En general, aunque hay eccemas húmedos, el resultado del eccema es una piel seca y cuarteada, frágil. Muchas cremas de farmacia contienen derivados de la cortisona, rápidas y efectivas en suprimir estos síntomas, pero su uso crónico sin supervisión médica puede provocar debilidad de la piel y una mayor propensión a eccemas e infecciones.
En caso de eccema, estas son algunas de las medidas que propone la medicina natural:
- Es importante no rascarse y, en el caso de los niños, mantenerles las uñas bien cortas.
- Una leche hidratante o un hidrolato (agua de rosa, de azahar o de hamamelis) pueden ser muy útiles, especialmente en eccemas secos, y se puede aplicar dos o tres veces al día.
- No todos los eccemas responden bien a las aplicaciones con agua como solvente. En esos casos es mejor usar elementos grasos: forman una película sobre la piel que reduce la transpiración y se considera un tratamiento hidratante.
Los solventes grasos más usados son:
- Almendras (neutro)
- Cacao (suavizante)
- Oliva
- Caléndula (muy suave, incluso para bebés)
- Rosa mosqueta (cicatrizante)
- Karité (pieles grasas)
- Granado (rico en grasas omega)
- Argán
Las cremas de caléndula, consuelda, karité y oliva son la alternativa sin corticoides para la mayoría de los eccemas.
No te laves en exceso, es mejor baños cortos y con poco detergente, ya que es irritante. Evita tomar el sol, especialmente en verano, y usa ropa interior de algodón o de cualquier otra fibra natural.
Qué alimentos comer y qué alimentos evitar
Estos cambios en la alimentación pueden ayudar a prevenir y mejorar el eccema:
- Consume alimentos ricos en vitaminas A, E y C, y suplementa con ácidos grasos omega, como el aceite de borraja o de onagra.
- Las frutas frescas y los aceites vegetales vírgenes de presión en frío pueden ayudarnos a obtener estas vitaminas.
- Evita alimentos que puedan producir una reacción de tipo alérgico, como marisco, fresas, chocolate, cacahuetes o maíz; así como aditivos alimentarios.
- Bebe abundantes líquidos. La hidratación de la piel empieza por dentro.
- Evita los fritos, grasas animales y aceites refinados en general. Utiliza aceite virgen de presión en frío.
- No bebas refrescos ni consumas azúcar, patatas fritas, chips, o alimentos basura (muy procesados).
- Los niños presentan más erupciones de la piel; pueden estar provocados por el consumo de huevos, leche, trigo, pescado, pollo, embutidos, marisco… La aplicación de manteca de cacao puede ser muy útil en estos casos.
- Consume alimentos ricos en azufre, como col, coliflor, brócoli, nabos, chirivías, ajos, cebollas, puerros, mostaza…
4 plantas que alivian el picor
Entre las plantas más recomendables para el tratamiento natural del eccema tenemos:
1. Corteza de roble
Para eccemas o dermatitis húmedas por su contenido en taninos (astringentes).
Para prepararlo:
- Hierve 15 minutos dos cucharadas soperas de corteza en medio litro de agua.
2. Avena
Para tomar un baño de avena calmante de 15 min:
- Hierve 10 min unos litros de agua con 300 g de harina de avena y sal marina.
- Luego añade gotas de un aceite esencial (niaulí, lavanda…).
3. Aceite de onagra
La aplicación de aceite de onagra sobre los eccemas supone una alternativa a los corticoides, aunque de menor intensidad. Bastantes estudios clínicos indican que es útil y efectivo.
4. Aloe vera
Los cosméticos a base de aloe vera son de calidad irregular por la inestabilidad de sus principios activos. El jugo fresco de aloe parece ser superior a las otras presentaciones.
Puedes aplicar el gel recién extraído de la hoja sobre la zona afectada por el eccema.