Mejora tu postura y siéntate a meditar sin rigidez
¿Quieres meditar sin rigidez? Con estos ejercicios podrás.
En Occidente hemos dejado de echarnos al suelo para realizar actividades en él. Desde pequeños, nos sentamos en sillas y olvidamos la forma natural de sentarse: en el suelo, con las piernas cruzadas. Luego, cuando queremos retomarla, nuestras limitaciones ya no nos lo permiten.
Pasar tantas horas en sillas hace que la cadera pierda movilidad y acorta la musculatura posterior. El estrés, a su vez, crea una flexión continua del tronco y del cuello que reduce nuestra capacidad de extensión y enderezamiento.
De adultos, estas limitaciones físicas y la rigidez mental nos impiden o dificultan muchas tareas. Entre ellas, meditar: nos resulta casi imposible comenzar porque no podemos sentarnos.
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Recupera tu conciencia corporal
Para recuperar la soltura, te propongo unos ejercicios de conciencia corporal que te revelarán tus limitaciones y te ayudarán a soltarlas.
- Empieza por sentirte. Como dicen los maestros zen, "sentarse y sentirse". Se comienza por ahí, pero nosotros invertiremos el orden: primero siéntete y descubre las partes de tu cuerpo que parecen hechas de yeso, las limitaciones, los dolores. Anótalo en una libreta y respétalo. Luego, siéntete en diferentes actividades de tu vida diaria: al caminar, estando de pie, al sentarte en una silla.
- Dónde pones tensión. Todo esto te dará información de tus acortamientos y limitaciones y de dónde pones tensión innecesaria. Porque esas actividades son las que van conformando nuestra estructura.
- Pasa al suelo. Ahora sí, siéntate como puedas en el suelo para meditar y explora cómo es tu respiración, en qué zonas la notas y en cuáles no; chequea tu espalda, rodillas, pies, manos, cuello. Y de nuevo, anótalo y memorízalo para que puedas después ir sintiendo tu progresión.
- Respira y déjate caer. En esa misma posición, haz una respiración profunda y déjate caer. Quédate ahí como si no pudieras más, y siente cómo está todo tu cuerpo. Desde ese lugar, respira hondo otra vez.
- Da con tu mejor postura. Regresa a continuación a la mejor postura
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