El abedul es un árbol llamativo, con su tronco blanco con rayas negras se puede reconocer fácilmente. A muchos puede molestarles la multitud de semillas voladoras y el polen que desprende, pero su utilidad medicina y práctica es enorme.

Del abedul se aprovecha casi todo. La temporada de cosecha comienza a principios de marzo con los brotes de abedul, seguida de la extracción de la savia de marzo a mayo.

Se pueden retirar también las hojas de abedul tiernas, jóvenes y todavía algo pegajosas de las ramas, que volverán a crecer rápidamente. También puedes cosechar y usar las hojas más fuertes hasta junio. Finalmente, la corteza también se puede usar.

Cómo y para qué usar el abedul

1. Abedul como alimento

Los brotes y las hojas tiernas de abedul se pueden usar como ingredientes culinarios con propiedades saludables por su alto contenido en vitamina C y en fitoquímicos antioxidantes.

La forma más fácil y rápida de usar las hojas jóvenes de abedul como alimento es comerlas tal cual o colocarlas en un sándwich con mantequilla o queso.

2. Abedul como sustituto de la sal

Como muchas otras especias, las hojas de abedul son útiles para reducir el uso de sal. Para elaborarla, las hojas secas se muelen finamente con las manos o en un mortero y se agregan con moderación a la comida como si fuera sal.

3. Azúcar de abedul (xilitol)

De la madera de abedul se puede extraer un azúcar (xilitol) con el 40% de las calorías del azúcar común y que en lugar de favorecer las caries, las previene.

4. Savia de abedul

En el centro de Europa, los pueblos germánicos consideraban la savia de abedul como un afrodisiaco. Hoy se vende en herbolarios como un remedio desintoxicante y diurético.

La savia contiene, entre otras cosas, azúcares, ácidos, sales y proteínas. A partir de marzo, se puede aprovechar la savia abundante del abedul plateado (Betula pendula).

Se pueden cosechar hasta 50 litros de esta saludable bebida de un árbol sin dañarlo. Recién obtenido el jugo se puede disfrutar en el acto o se puede guardar en el refrigerador durante unos tres días. También es adecuado para hacer jarabe (reduciéndolo al 10%) y limonada de abedul.

5. Infusiones de abedul elaboradas con hojas y brotes

Con los brotes y hojas se pueden preparar infusiones curativas. Su efecto purificante y diurético es muy adecuado para las curas de primavera.

La infusión de abedul potencia la eliminación a través de los riñones y ayuda a la piel, reduciendo problemas como el acné, la psoriasis y las heridas que cicatrizan mal.

Los extractos de hojas de abedul también se pueden utilizar como apósito y en baños para el reumatismo, la gota y la celulitis.

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6. Abedul como aditivo para el baño

Las hojas y la corteza de abedul también se pueden usar para preparar baños medicinales.

Un baño de corteza de abedul, por ejemplo, ayuda con las extremidades doloridas. Para hacerlo se hierven 250 g de corteza de abedul en un litro de agua y se cuecen a fuego lento durante 10 minutos.

Agrega la infusión colada al agua de baño tibia a un máximo de 38 °C. Un baño de corteza de abedul no debe durar más de 20 minutos para no ejercer demasiada presión sobre el sistema circulatorio.

7. Champú, acondicionador y tónico capilar

Las hojas de abedul también son adecuadas para el cuidado natural del cabello porque, en combinación con una dieta más alcalina, rica en vitaminas del grupo B y minerales, pueden ayudar a reducir la caída del cabello.

El champú, tónico capilar y acondicionador a base de hojas de abedul aseguran una limpieza natural y un cuero cabelludo con buena circulación sanguínea, libre de escamas y exceso de sebo, lo que beneficia a la raíz del cabello.

8. Tintura de abedul para la tos y para limpiar heridas

Los ingredientes curativos del abedul están concentrados en una tintura con brotes u hojas, que se puede conservar durante mucho tiempo. La tintura de cogollos de abedul puede aliviar la tos y reducir la fiebre.

Diluida con agua en una proporción de 1:10, es ideal para limpiar heridas, pero también se puede aplicar externamente para curar heridas.

Una tintura de brotes de abedul se prepara con unos 20 g de brotes de abedul y 100 ml de alcohol al 40% (sirven el vodka o el orujo), que se almacena en un frasco con tapa de rosca herméticamente cerrado a temperatura ambiente durante un mes.

Agitar la tintura a diario facilita la extracción de los principios activos. Trascurrido el tiempo se cuela y se guarda en un frasco oscuro bien cerrado; la tintura de abedul está lista para usar.

9. Aceite de abedul para el dolor y el cuidado de la piel

Al igual que la tintura, un extracto de aceite también ofrece la posibilidad de conservar las sustancias activas beneficiosas del abedul. Este tipo de macerado puede ayudarte con el dolor del reumatismo y la gota y para el cuidado de la piel seca y quebradiza, incluso en casos de dermatitis atópica y psoriasis.

Puedes hacer aceite de abedul fácilmente mezclando un puñado de brotes de abedul frescos con 100 ml de aceite de almendras o de oliva prensado en frío en un frasco con tapa de rosca.

Durante el período de maceración de cuatro semanas, los cogollos se dejan a temperatura ambiente y se agitan a diario. Pasado el tiempo de maceración se cuela y se guarda en un frasco limpio y oscuro.