El término cistitis indica inflamación de la vejiga urinaria y puede ser producida por un microbio o por mecanismos inflamatorios diversos, como una irritación alérgica o la reacción a determinadas sustancias.

Los principales síntomas de la cistitis son que al orinar escuece, vamos con excesiva frecuencia al aseo y salimos con la sensación de no haber orinado completamente. La orina puede estar turbia y presentar sangre o pus, y puede ser maloliente o parecer normal. Es frecuente, además, sentir una pesadez en el abdomen.

Qué causa la infección de orina

La cistitis es una enfermedad mucho más común en mujeres: entre diez y veinte veces más frecuentes. Esto es debido a que la uretra femenina es más corta y ancha que la masculina, y por las peculiaridades propias del acto sexual.

En general, además, el sistema urinario de las mujeres esté más desprotegido de la entrada de gérmenes. De hecho, la causa principal de la infección urinaria es la contaminación de microbios de origen digestivo, especialmente Escherichia coli.

Las principales causas de estas infecciones son:

  • El sexo. Es una de las causas más frecuentes de cistitis. La uretra femenina está casi tocando al ano, y las relaciones sexuales pueden facilitar el paso de gérmenes de un lado al otro. Ciertas prácticas como el sexo oral facilitan el contagio de la cistitis en las personas predispuestas.
  • Los cambios hormonales relacionados con el embarazo. Se reducen el tono de los uréteres y la presión del feto sobre el sistema urinario facilita la subida de patógenos.
  • La diabetes y ciertas alteraciones anatómicas. Estas patologías favorecen la predisposición a las infecciones urinarias, al igual que algunos medicamentos, como los anticonceptivos y el uso repetido de antibióticos.

Cómo prevenir y curar la cistitis

Cuidar algunos hábitos y determinados remedios naturales te ayudan a luchar contra la cistitis.

Para ayudar a prevenir la infección, es importante beber agua: el agua ejerce una función de arrastre en las infecciones, por lo que ayuda a evitar sus complicaciones.

El uso de geles íntimos, compresas, jabones o desodorantes puede irritar la mucosa urinaria y genital y dar síntomas parecidos a la cistitis. En esos casos, conviene cambiar de hábitos de higiene íntima.

Mientras tengas cistitis y sobre todo si sufres cistitis recurrente, también es importante que tengas en cuenta los siguientes consejos:

  • Evita los tampones.
  • No utilices el diafragma, contraceptivos orales o desodorantes íntimos.
  • Utiliza un jabón para bebé en tu higiene íntima.
  • No te aguantesmucho el pipí.
  • Límpiate bien después de hacer el amor, sobre todo con agua, y no olvides hacer pipí para eliminar los restos que puedan haber quedado en la uretra.

La mejor alimentación frente a las infecciones urinarias

También es básico cuidar la alimentación, pues ciertos alimentos pueden ayudar a provocar o bien evitar una cistitis. Entre los alimentos que pueden favorecerla, aunque se desconoce el mecanismo, la mayoría tienen en común que acidifican la orina, lo que aumentan el riesgo de complicaciones.

Alimentos que conviene eliminar o consumir con moderación:

  • Bebidas alcohólicas, refrescos carbonatados, cafeína, picantes, ahumados, tomates, cítricos, vinagre y chocolate son algunos de los alimentos que provocan irritaciones de la vejiga en algunas personas.
  • Reduce todo alimento enlatado o multiprocesado, los quesos curados, la salsa de soja o la levadura de cerveza. Todos ellos alimentos acidificantes.
  • Reduce o evita otros alimentos con acción acidificante como azúcar, harina blanca, lácteos, carnes...

Alimentos que debes potenciar para protegerte de las infecciones:

  • El consumo de una dieta rica en fibra y en líquidos, y la prevención natural del estreñimiento, son factores fundamentales para evitar las cistitis. Por tanto, aumenta el consumo de frutas y hortalizas.
  • Bebe mucha agua, unos dos litros al día.
  • El consumo de sales de citrato potásico o magnésico es un remedio natural que puede reducir la tendencia excesiva a las cistitis de algunas personas.
  • Los arándanos y el zumo de naranja son alimentos eficaces para prevenir y tratar las infecciones urinarias.

Las plantas medicinales, un gran apoyo al tratamiento

El tratamiento más habitual se realiza con antibióticos. Pero el uso sistemático de antibióticos debilita el sistema urinario y, a medio plazo, favorece la aparición de nuevas cistitis.

Las plantas medicinales pueden ayudarte a prevenir o junto con el tratamiento médico a eliminar la cistitis. Las especies más utilizadas son ricas en hidroquinonas, como la arbutina de la gayuba, que se convierten en antibióticos naturales en el momento de eliminarse a través del riñón.

Destacamos estas cuatro plantas, para tomar en infusión o en preparados vegetales:

  • Brecina (Calluna vulgaris). Deja reposar una cucharada de flores secas durante 10 minutos en una taza de agua recién hervida. Puedes tomar hasta tres tazas diarias. Es rica en glucósidos que se transforman en hidroquinonas antisépticas
  • Gayuba (Arctostaphylos uva-ursi). Tómala en infusión o cápsulas. La dosis media diaria: 10 gramos de gayuba en polvo (equivalente a unos 400-700 mg de arbutina), repartidos en 4-6 tomas.
  • Buchú (Barosma betulina). De esta planta se utilizan las hojas. La tisana se prepara en forma de infusión, 10-40 gramos por litro de agua, que tomaremos a lo largo del día.
  • Arándano rojo (Vaccinium macrocarpon). Fresco, seco o en cápsulas. La calidad de los preparados se mide en PAC (proantocianidinas). Elige productos con un mínimo de 150 mg.