¿Qué es la quercetina y en qué alimentos está?
La quercetina es un bioflavonoide muy eficaz para reducir procesos inflamatorios y controlar las alergias.
El organismo no puede producirlo, por lo que se ha de obtener de la dieta o con suplementos.
Se trata de un pigmento natural de color amarillo verdoso presente en vegetales como:
¿Qué beneficios tiene la quercetina?
La actividad antihistamínica de la quercetina ayuda a controlar los síntomas de la alergia (hinchazón, estornudos, picor, goteo nasal y lagrimeo ocular) y evita el daño que la hiperproducción de mediadores inflamatorios, como la histamina y los leucotrienos, produce en el endotelio vascular.
También previene la peroxidación lipídica (oxidación de los ácidos grasos que deteriora las membranas celulares) y aumenta la concentración de glutatión (un antioxidante que elabora el organismo de forma interna) en la mucosa intestinal. Ambas acciones que ayudan a reparar la frágil pared del intestino, equilibran su permeabilidad y detienen el paso de alérgenos a la sangre.
Además, la quercetina inhibe la replicación del ARN de los genomas víricos del herpes y otros virus, por lo que ayuda a controlar las infecciones.
Mejora asimismo la función contráctil del ventrículo izquierdo, protege las arterias coronarias y previene la formación de trombos intravasculares.
Aplicaciones terapéuticas de la quercetina
El gran poder antioxidante, antiinflamatorio y antiviral de la quercetina la convierte en uno de los principales flavonoides en la prevención y el tratamiento de múltiples patologías como:
- Alergias alimentarias y ambientales.
- Artritis e inflamaciones.
- Envejecimiento precoz.
- Infecciones virales como el herpes.
- Complicaciones de la diabetes, como las retinopatías.
- Neoplasias: ralentiza el crecimiento de las células cancerosas e incrementa su apoptosis (muerte celular, en este caso de las células malignas).
- Permeabilidad intestinal.
- Problemas circulatorios: arteriosclerosis, varices, hemorroides, etc.
Cómo se toma la quercetina en la alergia
La quercetina se comercializa en cápsulas, sola o combinada con otro bioflavonoides. Dado que los bioflavonoides favorecen la síntesis de vitamina C y previenen su oxidación, también es habitual encontrarla junto a esta vitamina.
Una dosis de entre 600 y 1.000 mg diarios durante las primeras semanas de reacción alérgica ayuda a reducir los síntomas en unos días.
Como prevención o mantenimiento bastan 300 o 500 mg diarios, según la patología y la gravedad de los síntomas.