Investigadores de la Universidad de Westminster (Reino Unido) han descubierto que los ácidos grasos de la familia omega-3 pueden ayudar a aliviar los dolores musculares que aparecen después de hacer ejercicio intenso.

Cómo alivian el dolor muscular los omega-3

No es cierto, como se creía, que las agujetas sean causadas por cristales de ácido láctico que se clavan en los músculos. En realidad el dolor es causado por las microlesiones que se producen en los músculos al exigirles un esfuerzo intenso y por los posteriores procesos inflamatorios. Además existe una pérdida de fuerza.

Los omega-3 ayudan porque favorecen la buena circulación sanguínea e inhiben la inflamación, de manera que se acelera la regeneración de los músculos y mejora el dolor.

Menos dolor muscular tras 4 semanas de consumo de omega-3

En el estudio de Westminster, que se publicó en la revista especializada International Society of Sports Nutrition, los participantes recibieron tres cápsulas de omega-3 o una preparación de placebo durante cuatro semanas.

Los suplementos de omega-3 fueron administrados con las comidas principales. Cada cápsula contenía aceite de pescado purificado con 1.040 mg de omega-3 (715 mg de ácido eicosapentaenoico y 286 mg de ácido docoxahenoico).

Esta cantidad responde a las recomendaciones nutricionales y no tiene efectos secundarios. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria considera que se pueden consumir hasta 5.000 mg diarios con seguridad.

Transcurridas las cuatro semanas, los participantes realizaron un entrenamiento muy intensivo (una carrera de montaña de 60 minutos de duración), con la que se buscaba desencadenar unas agujetas intensas (el daño muscular temporal estaba dentro de parámetros aceptables y seguros).

Luego se verificaron varios valores como la interleucina-6 y el TNF, dos valores de inflamación, o la enzima creatina quinasa (CK), cuyo valor aumenta cuando las células están dañadas, por ejemplo, en el caso de un ataque cardíaco o después de practicar ejercicio con intensidad. También se comprobó el rendimiento en diferentes intervalos de tiempo.

En el grupo de los participantes que había recibido omega-3, las agujetas fueron significativamente menores después de 24 horas. El nivel de interleucina-6 solo aumentó en el grupo de los participantes que habían recibido placebo, no en el grupo de omega-3.

El rendimiento en el grupo de placebo fue menor 24 horas después de la carrera que antes. En cambio no disminuyó notablemente en el grupo de omega-3. No hubo diferencias entre los grupos para los otros valores (CK y TNF).

Si tienes miedo a las agujetas, toma omega-3

Los ácidos grasos omega-3 pudieron reducir el dolor de las agujetas, por lo que son un recurso que puede animar a hacer ejercicio sin demasiado temor a las consecuenecias. Muchas personas evitan el deporte porque temen los posteriores dolores musculares. Ahora esa excusa ya no es válida.

Por supuesto, también depende mucho del estado físico de la persona y el entrenamiento que lleve a cabo. Esos factores decidirán si se producirán o no agujetas y, de ser así, cuán intensas serán.

Funciones de los ácidos grasos omega-3 en el organismo

Los omega-3 son ácidos grasos poliinsaturados que resultan vitales para el funcionamiento del organismo. A menudo, la dieta es pobre en estos ácidos grasos, lo que puede tener consecuencias indeseables.

Entre los efectos positivos de los ácidos grasos omega-3 en el organismo destacan:

  • Inhiben los procesos inflamatorios.
  • Proporcionan a la piel hidratación y elasticidad.
  • Regulan los niveles de colesterol y lípidos en sangre.
  • Participan en el funcionamiento del sistema inmunitario.
  • Son especialmente necesarios para el buen estado de las neuronas.
  • Mejoran el estado de los vasos sanguíneos.
  • Protegen los tejidos de las articulaciones.

Referencia científica: