Los extractos de hoja de parra son capaces de provocar la muerte de células cancerígenas de hígado y de mama. La acción anticancerígena se ha registrado bajo el microscopio y los investigadores esperan que el hallazgo sirva para desarrollar compuestos eficaces para el tratamiento del cáncer.
Los compuestos fenólicos antioxidantes que están presentes en la hoja de parra incrementan la expresión de un gen denominado Bax, que promueve el suicidio de las células enfermas, y reducen la activación del gen Bcl-2, con efecto opuesto al Bax.
Matan a las células cancerígenas y no hacen nada a las sanas
Además los investigadores pudieron comprobar que no se producía ningún tipo de efecto tóxico sobre las células sanas. Tampoco inhiben su multiplicación. Por lo tanto, el efecto de las hojas de parra resulta específicamente anticancerígeno.
"Dado que la apoptosis proporciona un mecanismo fisiológico para eliminar las células anormales, los factores dietéticos que afectan a la apoptosis pueden provocar un efecto importante en la carcinogénesis", explican los autores en el estudio.
Muchos tratamientos anticáncer tienen su origen en las plantas
En este sentido, las hojas de parra –un ingrediente típico de las cocinas turca, árabe y griega, con sus dolmades rellenas– y otros alimentos naturales antioxidantes –sobre todo frutas y hortalizas– desarrollorían un interesante papel preventivo.
Los autores del estudio, publicado en la revisa Molecules, recuerdan que gran parte de los tratamientos eficaces contra el cáncer se han desarrollado a partir de compuestos hallados en la naturaleza. Casi 90 de los 121 medicamentos prescritos actualmente para tratar los tumores tienen su origen en las plantas.