Las áreas de aplicación típicas de la raíz de regaliz son las enfermedades del tracto respiratorio superior, la gastritis y las úlceras de estómago. Pero los dientes y la cavidad bucal también se benefician del poder curativo del regaliz (Glycyrrhiza glabra). Dos sustancias que se encuentran en esta planta son capaces de eliminar las bacterias que producen enfermedades de las encías y caries, principales causas de la pérdida de dientes tanto en niños como en adultos.

El regaliz combate las bacterias que causan la caries

El científico suizo Stefan Gafner, que actualmente trabaja para la firma Colgate, explica en el Journal of Natural Products que la raíz desecada de regaliz es un remedio común en la medicina tradicional china contra los trastornos respiratorios y digestivos. Sin embargo, hasta ahora no se había comprobado científicamente su eficacia antibacteriana.

Dos compuestos del regaliz, la licoricidina y la licorisoflavana A, se han demostrado capaces de eliminar las dos bacterias que favorecen la aparición de las caries y una tercera que perjudica las encías (periodontitis).

Por tanto, estas sustancias y el extracto de regaliz podrían utilizarse como ingredientes de caramelos y pastas dentales para tratar y prevenir las infecciones orales. Por otra parte, también se estudia la eficacia del regaliz en el tratamiento de la hepatitis C.

La raíz de regaliz también mostró –en estudios realizados en laboratorio– resultados prometedores en la lucha contra la candidiasis oral (infección de la cavidad bucal por el hongo Candida albicans). El uso regular de un enjuague bucal con regaliz podría reducir la inflamación y aliviar el dolor.

Una planta indicada para los niños

Para los niños que en general están expuestos a un riesgo particularmente alto de desarrollar caries, el regaliz sin azúcar es muy adecuado. Chupar la raíz o un caramelo con regaliz sin azúcar estimula la producción de saliva. La saliva a su vez juega un papel importante en la prevención de la caries dental, ya que tiene un efecto antibacteriano y limpiador y contribuye a la remineralización de los dientes. De esta manera se combinan el efecto protector de la saliva con la acción del regaliz.

Regaliz sin glicirricina

La glicirricina es uno de los compuestos amargos de la planta de regaliz. Su actividad en el organismo hace que no sean recomendables los tratamientos prolongadas o en personas con determinados problemas, como hipertensión y afecciones del corazón.

Para evitar efectos secundarios indeseables se puede optar por los preparados de regaliz desglicirrizada con menso de un 1% de glicirricina. Es el único preparado de regaliz recomendado para personas con hipertensión.

El regaliz sin glicirricina mantiene la mayoría de propiedades medicinales de la planta, ya que conserva todos sus flavonoides.