Los ojos secos son un problema frecuente. Se produce los lagrimales no producen suficiente líquido para lubricar la córnea, lo que produce molestias, como picores, sensación de ardor, enrojecimiento, ojos llorosos e incluso visión borrosa.

En determinadas situaciones es más probable que aparezca el problema. Por ejemplo, en los espacios interiores con aire acondicionado que reseca el aire. Mirar una pantalla durante horas también puede favorecerlo.

En otros casos en que la causa exterior no está clara o es inevitable, los médicos recomiendan la aplicación de lagrimas artificiales. En algunos casos puede solicitar la realización de alguna prueba para determinar el origen del problema (podría ser, por ejemplo, la obstrucción de los lagrimales).

Los ojos secos son un problema que se asocia al envejecimiento (son más frecuentes a partir de los 50 años y afecta especialmente a las mujeres) y a algunos trastornos de salud como artritis, lupus, síndrome de Sjögren, afecciones de la glándula tiroides, deficiencia de vitamina A y diabetes.

Algunos medicamentos también pueden favorecerlos como antihistamínicos, antidepresivos y anticonceptivos.

Tratamiento natural de los ojos secos

Si sufres de ojos secos, comprueba que tu alimentación te proporciona suficiente vitamina A y ácidos grasos omega-3. En la alimentación vegetal la vitamina A se obtiene del betacaroteno de alimentos amarillos, naranjas y verdes como las zanahorias, los albaricoques o las espinacas.

Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en las semillas de lino y chía, en las nueces y en menor medida en los aguacates.

Además puedes incorporar hábitos que protegen los ojos:

  • Bebe suficiente agua (la recomendación general es de 1,5-2 litros diarios).
  • Cierra los ojos durante dos o tres minutos cuando lleves un rato leyendo o mirando una pantalla.
  • También puedes parpadear varias veces seguidas de vez en cuando.
  • Lleva gafas de sol para reducir la exposición al aire y al sol.
  • Asegúrate de que la humedad del aire está por encima del 40%, en caso contrario, valora la posibilidad de adquirir un humidificador.
  • Si trabajas delante de una pantalla, asegúrate de que el borde superior está un poco por debajo de la altura de tus ojos. De esta manera tendrás que abrirlos menos, lo que los dejará menos expuestos al aire. Además, no tendrás que flexionar las cervicales, lo que también te evitará tensiones y molestias en esa zona.

Si tu problema persiste, puedes aplicarte lágrimas artificiales que encontrarás en las farmacias. No es suficiente con las gotas que se venden para aliviar el enrojecimiento o el pico de ojos. Estos productos, en realidad, pueden agravar el problema porque tienen a aplicarse en exceso y crean dependencia. La lágrima artificial es un producto específico y seguro para tratar el problema.