Hay una pregunta en el ambiente: ¿los hombres tienen suelo pélvico? Evidentemente. Aunque parece evidente no lo es tanto, porque si el suelo pélvico femenino es un tabú y un desconocido, el masculino es un secreto de sumario. Hay muchos hombres que sufren problemas en silencio, sin saber que hay soluciones.

El suelo pélvico masculino es casi igual al femenino, exceptuando, obviamente el útero y la vagina. Mismos músculos, mismo funcionamiento, mismo sistema de presiones… Igual que el femenino, está directamente relacionado con la esfera urinaria, sexual y anal.

Los problemas comunes del suelo pélvico masculino

  • Problemas urinarios: incontinencia, vejiga hiperactiva, goteo post miccional, problemas con la próstata.
  • Problemas sexuales: disfunción eréctil, eyaculación precoz, dolores relacionados con el orgasmo, problemas mecánicos con la erección (pene curvo).
  • Problemas anales: incontinencia, dolor, hemorroides.
  • Problemas globales: dolor pélvico, dolor lumbar, hernias inguinal y umbilical.

La lista podría ser más extensa, pero el objetivo de este artículo es poner foco simplemente en la existencia del suelo pélvico masculino y sus características.

De la misma manera que las mujeres vamos a la ginecóloga por defecto, cuando los hombres tienen problemas consultan con el urólogo. Si hay suerte y el tema es anal, consultan con coloproctología. Pocos saben es que la fisioterapia del suelo pélvico puede ayudarlos con casi todos sus problemas. Hagamos una vista de pájaro sobre cómo puede ayudar.

Tratamientos de fisioterapia del suelo pélvico masculino

Incontinencias

La incontinencia miccional como consecuencia de una cirugía de la próstata es común. Pero la incontinencia anal ya no lo es tanto. Recordemos que incontinencia es cualquier “cosa” que se escapa de mi cuerpo, contra mi voluntad, ya sea líquido, aire o sólido.

La incontinencia anal es una situación extremadamente oculta pero presente. Una incontinencia (del tipo que sea) puede venir porque el músculo esté débil, pero también porque el músculo está tan tenso que no puede trabajar. Una incontinencia es la expresión de un sistema que no funciona bien.

La fisioterapia de suelo pélvico, como rama profesional especializada en la recuperación de la función del cuerpo, tanto a nivel sistémico como muscular, puede hacer frente a estos problemas con ejercicios específicos y personalizados.

Pene curvo

A veces el pene duele y se curva durante la erección. La curva puede ser tan importante que imposibilite la penetración. Esta situación puede ser consecuencia de la enfermedad de Peyronie o de un traumatismo. El pene curvo puede ser también de nacimiento.

Sea cual sea el origen, aparece una placa de fibrosis en una parte del pene, formando como una cicatriz. Las cicatrices no son elásticas, eso genera que, cuando el pene erecciona, la parte fibrosada no ceda y el pene se curve. A menudo, mientras la fibrosis se está instaurando, la erección es dolorosa.

Si un pene empieza a curvarse, la intervención rápida es crucial para empezar a elastificar los tejidos antes de que la fibrosis se haya instaurado. La fisioterapia tiene las herramientas para movilizar las cicatrices, liberar adherencias, llenar de sangre y revitalizar la zona.

Si un pene en erección se curva ligeramente, sin dolor ni problemas funcionales, de forma habitual, no significa que esté empezando una fibrosis. Simplemente habla de una tensión en algún tejido, seguramente en el sistema fascial. Esto es algo que el cuerpo asume e integra cada día, y no precisa tratamiento.

Disfunción eréctil

Una disfunción eréctil puede tener un origen vascular o puede deberse a problemas en la conducción nerviosa. También puede ser por estrés o a conflictos del mundo emocional. O puede ser un poco de todo.

A nivel sexual, muchos hombres se sienten sometidos a grandes presiones. El enorme desconocimiento imperante en el mundo sexual permite que sigan manteniéndose conceptos tipo: los hombres saben cómo hacer las cosas, tienen que cumplir, tienen que aguantar la erección… muchos hombres se miden a sí mismos según su erección.

A menudo, la tensión de la situación es la que bloquea el sistema e impide la erección. La fisioterapia del suelo pélvico y la fisiosexología tienen mucho que decir. Podemos estimular el sistema circulatorio, liberar nervios, estimular la conducción, relajar al sistema nervioso… Con información, ejercicios y trabajo sobre los tejidos puede haber grandes cambios.

Hernias

Recordemos que el suelo pélvico forma parte de un sistema de presiones. Este sistema, en conjunto, es como un globo y el suelo pélvico es la parte de abajo de este globo.

Todos sabemos que si aprietas un globo por arriba, se abomba por abajo, en este caso, se abomba (sufre) el suelo pélvico. Cuando hay un incremento de presión sobre un sistema cerrado, la presión intenta salir por algún sitio.

El suelo pélvico femenino tiene un “gran” orificio sin defensa de cierre: la vagina. Las mujeres drenamos los excesos de presión a través de la vagina, por eso expresamos problemas en la vagina y por eso los prolapsos se manifiestan en la vagina.

El suelo pélvico masculino no tiene ese punto de drenaje. Los hombres tienen un sistema en forma de sifón. El esfínter anal es fuerte (o debería serlo) y por lo tanto no sirve para liberar presión.

Los hombres expresan el exceso de presión en forma de hernias: hernia umbilical, hernia inguinal y a veces, hernia discal. Conceptualmente, una hernia se forma cuando la presión encuentra un punto débil en un músculo o entre músculos.

La reeducación para la gestión correcta de las presiones es territorio específico de fisioterapia del suelo pélvico.

Como ves, hay mucho que hacer y mucho que decir. Los hombres también tienen suelo pélvico y la fisioterapia del suelo pélvico es para todas y para todos. ¡Hazlo saber!