La mejor manera de evitar aditivos alimentarios perjudiciales para la salud es optar por una alimentación lo más natural posible, con el mínimo de alimentos procesados. Aprender a leer las etiquetas de los alimentos te ayudará a identificarlos y a distinguirlos de los aditivos más seguros, como los permitidos en la agricultura ecológica. También te permitirá evitar los aditivos de origen animal si eres vegano o vegetariano.