En España, cada persona consume una media de casi 142 litros de agua potable al día. En un consumo elevado que se puede reducir en buena medida. Una manera de hacerlo es recoger el agua de lluvia y emplearla en los usos donde no se necesita agua potable. A continuación te presentamos cinco ideas para utilizar el agua de lluvia en el hogar y el jardín.

1. Riega con agua de lluvia

Regar las plantas es la forma más sencilla de utilizar el agua de lluvia en tu propio jardín, terraza o balcón. Es uno del los principios básicos de la permacultura, el sistema de organización que toma como modelo los ecosistemas naturales.

El agua de lluvia es la mejor para las plantas por qué esta limpia (por mucho polvo o polen que recoja en su camino a la tierra) y no modifica la acidez ni la concentración de nutrientes en la tierra.

2. Agua de lluvia para el inodoro

En el hogar, puedes utilizar de manera segura el agua de lluvia recolectada donde no se requiera la calidad del agua potable. Úsala para llenar el depósito del inodoro, por ejemplo.

Si tienes una vivienda independiente puedes invertir en un segundo circuito de agua que llene las cisternas con el agua de lluvia, que solo se llenan de agua potable si la lluvia escasea.

3. Lavar la ropa con agua de lluvia

El agua de lluvia también es adecuada para lavar la ropa en determinadas condiciones. Esto no solo es ecológico, sino también bueno para la máquina. Porque, a diferencia del agua del grifo, el agua de lluvia no contiene cal.

Al lavar con agua de lluvia blanda, ahorras detergente en polvo y proteges las mangueras y la mecánica. El uso de agua de lluvia no empeora el resultado del lavado ni aumenta el contenido de gérmenes en la ropa. No obstante, esta idea podría estar contraindicada para las personas con enfermedades que debilitan la inmunidad.

4. Usa agua de lluvia para limpiar

Limpiar cristales, fregar suelos, lavar el coche... El agua de lluvia es ideal para estos usos. Si además utilizas productos de limpieza caseros, estás protegiendo doblemente el medio ambiente y ahorrando mucho dinero.

No tienes que preocupar por las bacterias. El agua que cae por los colectores de lluvia es suficientemente limpia para estos usos.

5. Planchar la ropa con agua de lluvia

Para aumentar la vida útil de las planchas, los fabricantes recomiendan usar solo agua destilada. Sin embargo, para producirse y comprarse genera el consiguiente gasto energético. Si usas agua de lluvia, puedes ahorrar dinero y tiempo al planchar.

Dado que el agua de lluvia está libre de cal, no deja ningún depósito en la plancha de vapor, que es la mejor opción desde el punto de vista higiénico. A temperaturas superiores a 100 ºC las posibles algas, esporas y similares mueren.

Cómo recolectar agua de lluvia

Para la recolección de agua de lluvia a pequeña escala, los cubos colocados en la terraza o el balcón o el clásico barril de lluvia son más que suficientes.

Sin embargo, si tu objetivo es un suministro interno permanente de agua de lluvia, vale la pena instalar un sistema de recolección de agua de lluvia que incluya canalizaciones, un depósito y una bomba.

Con un sistema de este tipo, el agua de lluvia se procesa de forma totalmente automática y puede suministrar agua para el riesgo, para la lavadora, los inodoros, el lavavajillas y otros electrodomésticos.