Cuando llega el buen tiempo, las alpargatas y las sandalias con suela de esparto se convierten en mis zapatos preferidos. Son bonitas, cómodas y frescas, ideales para el verano.
No obstante, y del mismo modo que ocurre con todo tipo de calzado, pueden llenarse de polvo y suciedad y, por desgracia, no son tan fáciles de limpiar como otros zapatos. La suciedad queda atrapada entre las fibras de esparto y, con el tiempo, pueden verse sucias y descuidadas.
¿Cómo podemos limpiarlas? Hay una forma fácil y natural que te ayudará a dejarlas como nuevas ¡Toma nota!
Cómo limpiar las sandalias con suela de esparto
La experta en limpieza Lucía Lipperheide (@home.styles) ha compartido en su Instagram un truco muy útil para limpiar las alpargatas y las sandalias con suela de esparto, que a ella le ha funcionado especialmente bien para eliminar el polvo y la suciedad acumulado después de la Feria de Sevilla:
Esta manera de limpiar las sandalias con suela de esparto consta de 3 fases:
- Limpiar la tela con agua micelar
- Limpiar a fondo el esparto
- Impermeabilizar la suela de esparto
Veamos cada uno de los pasos más a fondo.
1. Limpiar la tela con agua micelar
Lo primero para limpiar las sandalias es quitar la suciedad de la parte de la tela. Para ello, Lipperheide un producto tan cotidiano como el agua micelar. Del mismo modo que atrapa y disuelve los restos de maquillaje de la piel, también es capaz de eliminar la suciedad de las telas. “Es ideal para arrastrar polvo, sudor o manchas sin dejar cerco”, afirma la experta.
Estos son los pasos a seguir para dejar la tela de las alpargatas como nueva:
- Lo primero es cepillar el zapato para eliminar todo el polvo, tierra y suciedad superficial y evitar que manche más el zapato al limpiarlo.
- A continuación, limpia la tela (en el caso de Lipperheide, es ante) con un algodón empapado en agua micelar, frotándolo bien por toda la superficie.
- Después, si hay manchas en el interior de la suela puedes limpiarlas también con otro algodón empapado en agua micelar.
2. Limpiar a fondo el esparto
La parte del esparto es la más difícil de limpiar. No lo puedes poner en la lavadora ni sumergir en agua porque la humedad puede hacer que se pudran por dentro y salga moho. Además, con demasiada humedad, la suela de goma se puede despegar. Eso no quiere decir que no la podamos limpiar por la parte de fuera con un poco de agua y jabón, siempre que inmediatamente después la sequemos bien.
Estos son los pasos a seguir para eliminar la suciedad del esparto sin estropear el zapato:
- Mezcla un poco de agua tibia con unas gotas de jabón lavavajillas líquido en un recipiente.
- Aplícalo en la suela de esparto con ayuda de un cepillo de uñas y frótalo suavemente, sin hacer fuerza para no levantar las fibras del esparto.
- Retira la espuma y los restos de jabón con un paño húmedo.
- Seca bien el esparto con un secador de pelo para evitar que quede húmedo demasiado tiempo.
- Comprueba que el ante está seco, cepíllalo para levantar el pelo e igualar el tono.
3. Impermeabilizar la suela de esparto
El último paso consiste en impermeabilizar el zapato para evitar que se ensucie tanto y que coja humedad. Se hace con cola blanca, que cuando se seca no tiene color y protege el esparto del agua, las manchas y el polvo.
Estos son los pasos para aplicarlo:
- Mezcla agua y cola blanca a partes iguales.
- Aplica la mezcla con la ayuda de un pincel en toda la suela de esparto.
- Deja que la cola se seque bien durante unas horas.
- Por último, aplica un spray impermeable por todo el zapato para que si se mancha sea más fácil limpiarlo.
Con esto, tal y como asegura Lucía Lipperheide, tus alpargatas o sandalias de esparto “ya estarían listas para volver a estrenar”. ¿Te animas a probarlo?
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