El cuarto de baño suele ser una de las estancias más olvidadas cuando hablamos de energía en el hogar. El dormitorio, la cocina o la sala de estar parecen mucho más importantes. Sin embargo, el baño, según el feng shui, es realmente uno de los principales puntos de fuga energética en el hogar.

Si no se cuida con conciencia, esta habitación de la casa puede convertirse en un foco de desequilibrio, atrayendo estancamiento, cansancio o incluso bloqueos en el bienestar y en la prosperidad.

Maite Pérez, experta en feng shui, tiene una solución preventiva: "Pon un cuenco con sal en una esquina del baño para renovar la energía de casa".

Este gesto sencillo no solo limpia energéticamente el ambiente, sino que actúa como un potente neutralizador de influencias negativas. Te contamos por qué, cómo potenciar su efecto y qué otras cosas puedes hacer para equilibrar la energía del hogar evitando fugas en el baño.

La sal como purificadora energética

Entre los elementos más poderosos y sencillos para limpiar energéticamente un espacio está la sal. Colocar un cuenco con sal gruesa en alguna de las esquinas del baño ayuda a absorber la negatividad acumulada, especialmente en espacios con poca ventilación o que suelen quedar fuera de nuestra atención diaria. De ahí la recomendación que la experta Maite Pérez comparte a través de su cuenta @activafengshui en Instagram.

El truco de poner un cuenco con sal en el cuarto de baño no solo es económico, sino que tiene siglos de tradición en diversas culturas.

Puedes dejar el cuenco una semana y luego reemplazar la sal por una nueva, desechando la anterior lejos de casa. De esta forma, te aseguras de mantener el flujo energético limpio y en movimiento.

Cómo evitar que la energía positiva se pierda

Otro de los consejos más importante de Maite Pérez para mejorar la energía de tu casa desde el baño es mantener siempre la puerta del baño cerrada. Puede parecer un detalle insignificante, pero en feng shui simboliza contener la energía para que no se disipe hacia zonas menos favorables.

Lo mismo ocurre con la tapa del inodoro: al estar relacionada con el elemento agua, dejarla abierta puede simbolizar pérdida de energía vital e incluso de dinero. De ahí que una recomendación habitual del feng shui sea la de cerrar la tapa del inodoro siempre que no se esté utilizando.

Dejar cerradas la puerta del baño y la tapa del inodoro no solo mejora el flujo energético, sino que aporta una sensación de orden y cuidado que se refleja en todo el hogar. Son acciones cotidianas que, integradas con intención, pueden cambiar radicalmente las sensaciones que proporciona ese espacio.

Plantas y aromas, los mejores armonizadores para el baño

El feng shui recomienda incluir elementos naturales en el baño para contrarrestar el exceso de humedad y energía descendente.

Helecho en un baño
iStock Photo.WichitS

Una excelente opción es colocar plantas vivas que, además de ayudar a controlar el moho, oxigenan el ambiente, aportan vitalidad y equilibran el chi o energía vital. Algunas variedades resistentes a la humedad, como el poto, la sansevieria o el bambú, son ideales para estos entornos.

Además, se puede complementar con el uso de un difusor de aceites esenciales. Maite Pérez sugiere optar por esencias como lavanda, eucalipto o romero: "Estos aromas elevan la vibración del espacio, aportan claridad y promueven una atmósfera de bienestar y limpieza emocional".

Pequeños hábitos, grandes resultados

Transformar la energía del baño no requiere grandes reformas, sino atención consciente y constancia. Revisar regularmente que no haya fugas de agua, mantener los desagües limpios y ventilar a diario también son prácticas recomendadas para evitar que la energía se estanque o deteriore.

Y si quieres ir un paso más allá, puedes incorporar elementos decorativos como espejos bien ubicados (evitando que reflejen el inodoro), colores de tonos suaves en las paredes y textiles naturales.

Todo esto contribuye a generar un espacio de calma y renovación que se traduce en una mejor energía para ti y tu hogar.

Cultiva el bienestar cuidando los detalles

Bombas de baño caseras

Hacer tus propias bombas de baño es más fácil de lo que crees y te permite incluir tus ingredientes favoritos.

iStock. Irina Bort

Cuidar la energía del baño es, en realidad, una metáfora de cómo cuidamos de nosotros mismos. Un lugar ordenado, limpio y con intención es reflejo de un interior alineado.

Siguiendo estos consejos, y con acciones tan simples como cerrar una puerta o poner sal en un rincón, puedes comenzar a transformar tu espacio para que contribuya tu equilibrio. Recuerda que, cuando el hogar fluye, también fluye tu vida.

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