Cuando dormimos, el cuerpo es capaz de eliminar toxinas, pero hoy día son tantas las que llegamos a acumular que el cuerpo se sobrecarga. No las puede eliminar, transformar ni drenar completamente, y es entonces cuando aparecen síntomas de sobrecarga tóxica.

¿Por qué hacer una cura depurativa?

La enfermedad, incluso el cansancio y la fatiga, puede verse como una acumulación de toxinas, físicas y mentales, en un organismo saturado que no dispone de suficientes recursos para realizar correctamente la eliminación y, como consecuencia, tampoco sus funciones vitales.

Para ir eliminando parte de estas toxinas acumuladas, el cuerpo necesita que se detenga la ingesta de alimento sólido a través de una depuración o ayuno. De esta forma, al no tener que dedicar todas sus fuerzas a digerir, puede recuperar su capacidad intrínseca de autocuración, limpieza y regeneración.

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Beneficios de hacer un detox

Aunque el proceso de limpieza a menudo no sea muy agradable, es necesario para mantener la salud. Aprender a depurarse con sabiduría y amor es clave para que resulte eficaz y saludable. Si se hace bien:

  • El cuerpo responde. Al empezar una depuración o un ayuno, el cuerpo responde con crisis curativas de desintoxicación. Las toxinas empiezan a eliminarse del organismo y se regeneran los órganos de eliminación, sobre todo el hígado.
  • El hígado se regenera. El hígado tiene una capacidad de regeneración del 70% y es el órgano que realiza la función más importante de drenaje de toxinas. Las metaboliza hasta convertirlas en hidrosolubles para que después los riñones las puedan eliminar a través de la orina.
  • Muchos otros beneficios. No solo inhibe el crecimiento de virus, aumenta la capacidad destructora de bacterias invasivas y elimina sustancias tóxicas, sino que nos abre a las energías sutiles, a la espiritualidad y nos afina para que brille nuestra creatividad.

Señales de que necesitas una depuración

Es muy probable que precises hacer una depuración si presentas estos síntomas:

  • Te sientes cansada, o sientes pesadez física o mental.
  • Sufres insomnio o te despiertas entre las 3 y las 6 de la madrugada sin quererlo.
  • Tienes cambios de humor y/o desequilibrios hormonales.
  • Tienes dolor en las articulaciones y/o en los músculos.
  • Experimentas niebla mental o estás espesa.
  • Tienes dolores de cabeza.
  • Te cuesta perder peso. Te sientes lenta.
  • Tienes problemas digestivos, gases, vientre hinchado, colon irritable, disbiosis intestinal.
  • Sufres de alergias, asma, problemas respiratorios o exceso de mucosidad.
  • Tienes menstruaciones irregulares, dolorosas o abundantes.
  • Tienes erupciones cutáneas, se te cae el pelo o tienes eccemas o psoriasis.

El ayuno en la dieta depurativa

Para que el proceso de depuración sea efectivo, debe contener una fase de ayuno. El ayuno es la ausencia de alimento y debe durar al menos 16 horas, lo que se consideraría un ayuno fisiológico o intermitente: 16 horas de no-ingesta que se llevan a cabo por la noche, de las 19 h a las 11 h. En las depuraciones más eficaces, los ayunos durarán de 24 a 72 horas.

  • Cómo influye la duración. Durante la fase de ayuno es cuando realmente el organismo se limpia, sana y regenera. Por eso, cuanto más larga sea, mayor regeneración y limpieza. Tenlo en cuenta a la hora de programar tu plan de depuración.
  • El largo no es para todos. Si bien los ayunos completos, en los que se interrumpe del todo la ingesta de alimento durante unos días (normalmente de 7 a 21 días), pueden ser muy eficaces, no todo el mundo está preparado para hacerlo o se lo puede permitir. Las causas pueden ser varias: sea el estado de salud, su realidad emocional, los hábitos alimenticios y adicciones, o las responsabilidades laborales y familiares, que no permiten descansar lo que exigen el ayuno completo y las hipoglucemias de los primeros días.
  • Demasiadas toxinas de golpe. Además, si la toxemia corporal es elevada, un ayuno completo podría causar una eliminación de toxinas aguda y crear complicaciones en los principales órganos de eliminación: riñones, hígado, pulmones, piel, linfa e intestino.

Cómo y cuándo hacer un ayuno detox

Dados los fuertes síntomas de los ayunos prolongados, lo más seguro, práctico y saludable es hacer depuraciones a base de zumos, batidos y sopas verdes con ayunos racionales de entre 16 y 72 horas.

  • Son superalimentos fáciles de preparar y tomar. Llevan cantidades concentradas de nutrientes y, como están licuados, es decir, premasticados, los digerimos y asimilamos de inmediato, en solo 20-35 minutos. Aportan minerales, vitaminas, enzimas, antioxidantes, clorofila, fibra, agua y aminoácidos en muy poca sustancia y calorías, beneficiando así a todos los sistemas del organismo de forma rápida y ligera.
  • Es importante «masticar» cada sorbo del zumo o batido para que se activen las enzimas digestivas y los nutrientes se asimilen completamente. Un zumo, batido o sopa debería tomarse en no menos de 30 minutos.
  • Al depurarnos de esta forma, nutriéndonos al mismo tiempo, no es necesario detener por completo nuestra actividad física o laboral.
  • Recomiendo hacer el detox en días de luna menguante, pues durante esta fase se dan las condiciones para que el cuerpo se desprenda de forma cómoda y eficaz de lo que no necesita. Además, acabar la depuración en luna nueva nos facilitará integrar nuevos hábitos saludables. Aquí puedes consultar el calendario lunar para saber cómo adaptarlo.

Qué síntomas esperar y cómo aliviarlos

  • Dolor de cabeza. Puede aparecer en los ayunos prolongados, sobre todo si ya se sufrían migrañas. Descansar, beber mucha agua, tomar aire fresco y aplicarse 1 gotita de aceite esencial de menta en las sienes ayudarán a minimizarlo.
  • Mal aliento y boca seca. El mal sabor de boca, el mal aliento, la lengua blanquecina o la boca pastosa o seca indican que la eliminación de toxinas se ha puesto en marcha.
  • Náuseas. Otros síntomas que pueden producirse son las náuseas o vómitos en pequeña cantidad, transparentes o con bilis. Las infusiones de jengibre pueden ayudar.
  • Estreñimiento. Para evitarlo conviene aumentar la ingesta de fibra en los dos o tres días previos al détox y mantenerse bien hidratado.
  • Debilidad y cansancio. Es normal, sobre todo los primeros días y si la ingesta de azúcares era previamente elevada. Conviene reducir la actividad y el gasto energético en los días de ayuno y descansar mucho.

Adapta el ayuno a tus necesidades

Al hacer una cura depurativa ten en cuenta tu objetivo y características. Estos consejos te ayudarán.

  • Para personas activas

Precisas mayor cantidad de proteínas. Puedes añadir, por ejemplo, 1/2 manojo de espárragos o 1 de brotes de guisantes en los zumos de la mañana o del día de ayuno.

Para sostener la actividad sin perder peso, puedes incluir higos secos en los batidos, como en el «superlimpiador» del plan de 3 días.

  • Para perder peso

Puedes aligerar las ingestas sustituyendo algunos alimentos por otros más ligeros. En el plan detox de 3 días, por ejemplo, el aguacate de la sopa por pepino, menos graso, o en el zumo de raíces, la remolacha por apio, de menor índice glucémico.

Practica ejercicio por la mañana, 45-60 min. ¡Suda!

  • Si sufres candidiasis

Mejor si evitas las frutas y alimentos ricos en carbohidratos. En las recetas del plan de 3 días, por ejemplo, sustituye las manzanas por pepino; en el zumo de raíces, usa 6 ramas de apio en lugar de remolacha y zanahoria.

Toma 3 tazas al día de infusión de lapacho 1 h antes de los licuados o 2 h después.

  • Si necesitas comer para no perder peso

Si no puedes estar sin comer y no quieres perder peso, sigue los mismos consejos que las personas activas.

Prepara unos bastoncillos de apio y zanahoria para picar en momentos de crisis.
Toma una infusión de manzanilla entre las 17 y 19 horas, para aliviar la ansiedad y practica yoga, 30-45 min.