Los miomas son tumores benignos del útero. Crecen en 1 de cada 5 mujeres fértiles y en cerca del 50% a partir de los 50 años.

No se sabe claramente qué los causa, aunque se apunta a factores hormonales y genéticos. Lo más recomendable es acudir a un médico integrativo para que diseñe y controle el tratamiento complementario adecuado en cada caso, pues debe tener en cuenta diversos aspectos físicos y emocionales.

El tratamiento puede ser complejo y precisa de supervisión.

Nutrientes protectores frente a los miomas

Es necesario evaluar, regular y tratar el eje hormonal: al nivel de las glándulas sexuales, pero también de tiroides, hipófisis e hipotálamo. A tal efecto puede ser útil tomar suplementos o alimentos ricos en nutrientes que ayuden a ello.

1. Vitamina E

Actúa como regulador hormonal, reduce la permeabilidad capilar y protege de la degeneración celular. Abunda en aceites vegetales vírgenes de primera presión en frío.

Los anticonceptivos orales dificultan su acción.

2. Vitamina A

Protege las mucosas, actúa sobre el epitelio del útero, interviene en la síntesis de hormonas sexuales y previene la degeneración sexual por la edad. Abunda en frutas y hortalizas anaranjadas.

3. Vitamina D

Estudios recientes respaldan la terapia con vitamina D3 como segura y eficaz. Interviene en la salud hormonal sexual femenina. Su principal fuente es el sol.

4. Omega-3

El DHA tiene una acción específica sobre los tejidos neuronales y reguladora del sistema reproductor. Está presente en el pescado azul y, para veganos, en las microalgas Crypthecodinium cohnii. El organismo también puede transformar en DHA el ácido graso alfa-linolénico, el omega-3 de los alimentos vegetales.

5. Indol-3-carbinol

Contribuye a regular el eje hormonal sexual, es antioxidante y antitumoral. Se halla en coles y nabos.