Las patatasson uno de los alimentos más versátiles y se utilizan en innumerables platos en todo el mundo. Pero hay una pregunta que mucha gente se hace a la hora de preparar el tubérculo saludable: ¿debo pelar las patatas o puedo comerlas con piel?

Esta decisión depende de varios factores: tus preferencias personales, las exigencias del plato, pero también aspectos de salud.

¿Patatas con o sin piel? Es cuestión de gustos

Pelar patatas depende, por un lado, de tus preferencias personales, del sabor deseado y de la textura preferida para un plato determinado.

Las patatas peladas suelen tener una textura y un sabor más suaves. Esto los hace ideales para platos como puré de patatas o ensalada de patatas, en los que se desea una consistencia uniforme donde la piel sería un estorbo.

La piel puede influir un poco en el sabor, ya que aporta una nota ligeramente terrosa. Si te gusta ese sabor “rústico”, puedes dejarles la piel a las patatas.

El tipo de plato que estés cocinando también influye en si es mejor pelar las patatas o no. Si deseas hacer patatas fritas crujientes o patatas al horno, la piel proporciona una superficie crujiente. La piel no suele jugar un papel tan importante en sopas o guisos.

Nutrientes en la piel de patata

Además de las preferencias de sabor y las consideraciones específicas del plato, también debes considerar los aspectos de salud al decidir si debes pelar las patatas.

Una cantidad especialmente grande de minerales, vitaminas y fitoquímicos se encuentran directamente en la piel o inmediatamente debajo de ella. La cáscara de patata tiene los siguientes beneficios para la salud:

  • El mayor contenido de fibra en las patatas se encuentra en la piel, que constituye entre el uno y el dos por ciento de la patata. La piel contiene aproximadamente un 52 por ciento de fibra, en su mayoría insoluble, que aumenta el volumen del bolo alimenticio y favorece el tránsito intestinal.
  • Las pieles de patata son ricas en almidón resistente, que puede mejorar la actividad intestinal y hacer que los niveles de azúcar en sangre aumenten lentamente después de comer.
  • Las patatas contienen muchas vitaminas B y C. Sin embargo, algunas de estas vitaminas solubles en agua se pierden durante la cocción. La cáscara de la patata actúa como una barrera al cocinar: si cocinas las papas con la cáscara, se libera menos sabor y nutrientes al agua. Esto significa que quedan más sustancias valiosas en la patata.

Toxinas en la piel de la patata

Sin embargo, la cáscara de patata contiene no sólo nutrientes y fibra, sino también glicoalcaloides tóxicos: solanina y chaconina.

Estas toxinas se encuentran naturalmente en las patatas. Se concentran principalmente en la cáscara y en los brotes. En  el interior de la patata hay muchas menos toxinas.

Los glicoalcaloides son termoestables pero solubles en agua. Esto significa que las altas temperaturas no afectan las toxinas. Sin embargo, si cocinas las patatas en agua hirviendo, algunas sustancias se eliminarán de la cáscara. Por eso no debes utilizar el agua de cocción para cocinar.

La mayoría de las variedades de patatas modernas no suelen contener niveles nocivos de solanina, normalmente entre 1,8 y 9,4 mg por 100 g de peso fresco. El límite máximo de contenido de solanina en las patatas vendidas comercialmente es de 200 mg por kilogramo de peso fresco.

El contenido real de estas sustancias también se ve influenciado por varios factores:

  • Hay más toxinas en las patatas verdes y en germinación intensa que en las patatas nuevas.
  • Los daños (por ejemplo, durante el transporte) y la luz favorecen la formación de toxinas.
  • Si las patatas se almacenan demasiado calientes o demasiado frías se forman más toxinas.

¿Pelar patatas o no?

Aunque la piel contenga una cantidad significativa de glicoalcaloides, no es necesario pelar las patatas, siempre que estén frescas, en buen estado y se almacenen correctamente.

Si las patatas las van a consumir niños pequeños, es recomendable pelaras como medida de precaución. Para reducir la pérdida de nutrientes al cocinar, puedes preparar primero las patatas con piel y luego pelarlas.

Las manchas verdes son una indicación de una mayor cantidad de toxinas. Recorta generosamente las zonas verdes. Debes descartar por completo las patatas muy verdes.

Pelar patatas de forma fácil

Puedes pelar patatas fácilmente con las siguientes instrucciones:

  1. Limpia las patatas y córtales la piel por todos lados con un cuchillo afilado.
  2. Cocina las patatas hasta que estén tiernas. Asegúrate de que las patatas no estén demasiado blandas, de lo contrario podrían desmoronarse al pelarlas.
  3. Coloca las patatas cocidas en agua con hielo y déjelas enfriar allí durante al menos diez segundos.
  4. Luego puedes simplemente pelar la cáscara con los dedos o con un cuchillo con facilidad.

Con este método podrás pelar patatas muy fácilmente. Sin embargo,no es magia y la piel no siempre se desprenderá “de una sola vez”. Si la patata está un poco deformada o tiene pequeñas “manchas”, tendrás que recortar en algunos lugares.