Cada día se toman en el mundo unos 220 millones de aspirinas, lo que convierte a este fármaco en el más consumido de todos. Se fabrica en laboratorio con ácido acetil-salicílico, que originalmente se aisló de compuestos presentes en algunas plantas, como la ulmaria o el sauce blanco.
Hoy los remedios con corteza de sauce siguen siendo una alternativa válida a la aspirina como analgésico natural. Ya en época de Dioscórides, se consideraba útil contra los ataques de fiebre y los dolores reumáticos.
El sauce blanco (Salix alba) es un árbol caducifolio de hasta 15 metros de alto, con la copa amplia, la corteza pardo grisácea con hendiduras longitudinales y las ramas jóvenes finas y elásticas. Las hojas son lanceoladas, sedosas, verde grisáceas por al anverso y blancas por el reverso. Flores masculinas y femeninas aparecen en árboles distintos, y son amentos colgantes.
Crece en márgenes de ríos y arroyos, formando bellos y necesarios cinturones de vegetación de ribera, que acogen a una fauna variada. La madera, flexible, se ha usado en ebanistería y en Gran Bretaña se emplea para fabricar los palos de cricket. Con las ramas jóvenes se hacen cestos y muebles de jardín.
Propiedades medicinales del sauce blanco
Con fines medicinales se utilizan la corteza, los amentos y las hojas. Los compuestos salicílicos le confieren efectos analgésicos, antitérmicos, antiinflamatorios, antirreumáticos y antiespasmódicos, por lo que se utiliza con los siguientes fines medicinales:
- Para aliviar el dolor: Los remedios con sauce se destinan principalmente a calmar el dolor, sea en trastornos reumáticos, dolor de espalda, cefaleas, neuralgias, bursitis, tendinitis o dolores espasmódicos de la menstruación y los vinculados al climaterio.
- Para reducir la fiebre: Como la aspirina, el sauce resulta eficaz para bajar la fiebre en ataques febriles, procesos gripales e infecciones gástricas y urinarias.
- Contra la acidez de estómago: El sauce –asociado normalmente a regaliz, malvavisco y anís verde– es también astringente y antiácido, útil en caso de acidez estomacal, espasmos gastrointestinales y diarrea.
- Contra la migraña y la inflamación: Se usa junto con otras plantas para aliviar la migraña y el dolor por inflamación en las articulaciones (ver Fórmulas de herbolario).
Remedios naturales con sauce blanco
- Tisana para aliviar la migraña y el dolor articular: Se prepara combinando la corteza de sauce blanco con harpagofito y uña de gato, y se añade anís estrellado para mitigar el sabor entre amargo y áspero del sauce. Cómo prepararla: Se necesita una cucharada sopera de la mezcla por un cuarto de litro de agua, se hierve durante 5 minutos, se deja reposar otros 10 y se cuela. Se puede tomar a lo largo del día, a pequeños sorbos.
- Tisana para bajar la fiebre: Se aconseja combinar el sauce blanco con genciana, saúco y tomillo, a partes iguales. Cómo prepararla: Se hierve una cucharada sopera rasa de la mezcla por vaso de agua 2 minutos, se deja reposar otros 10 y se cuela. Se toman 3-4 vasos diarios mientras persista la fiebre y se le puede añadir miel de tomillo para mejorar el sabor.
Cómo se toma
En planta seca para decocción e infusión, en tintura, extracto líquido o nebulizado, polvos y cápsulas.
Precauciones y contraindicaciones
- En dosis moderadas y periodos cortos, el sauce no causa irritación ni daños en la mucosa digestiva, como sí ocurre con la aspirina en muchas personas; no obstante debe evitarse en caso de hipersensibilidad a los salicilatos o úlcera gastroduodenal.
- Se desaconseja igualmente si se tienen problemas de coagulación sanguínea o hemorragias activas.
- No debe suministrarse en el embarazo, la lactancia ni a menores de 6 años.
Jordi Cebrián. Asesora: J Mª Teixé, herborista de «El Manantial de Salud»