A simple vista, un inodoro puede parecer perfectamente limpio. Pero basta con fijarse en los bordes, el fondo o la base para notar que, con el paso del tiempo, se acumulan manchas de todo tipo, residuos y olores que no se van con una limpieza superficial.
Por suerte, hay formas de solucionarlo sin necesidad de productos agresivos ni largas horas de frotar. Lucía Lipperheide, especialista en limpieza doméstica y autora de numerosos consejos virales, comparte su método personal para dejar el inodoro más limpio que nunca.
Los cuatro trucos para dejar el inodoro impoluto
Cuatro trucos caseros que no requieren más que vinagre, papel de cocina, bicarbonato y un par de ingredientes básicos que seguramente ya tienes en casa.
1. Vinagre en los bordes: el truco de la noche
Una de las zonas más olvidadas del inodoro es el borde interior, el que queda escondido por un reborde interno.
Es ahí donde se acumula una capa de suciedad que no se ve fácilmente, pero que con el tiempo forma depósitos difíciles de eliminar.
Esta suciedad se elimina con un truco tan simple como eficaz:
- Enrolla tiras de papel de cocina, las empapas bien con vinagre de limpieza y las coloca bajo el borde, ajustándolas y apretándolas bien.
- Las dejas actuar toda la noche y, al día siguiente, retiras el papel y aclaras; ya verás que sale todo lo que no se ve habitualmente.
Este método permite que el vinagre actúe durante horas deshaciendo los restos calcáreos y la suciedad. Y como es natural y desinfectante, no hace falta añadir nada más.
2. Una bomba casera para el fondo del inodoro
El fondo del inodoro es otra zona crítica. Es donde se forman manchas grises o marrones, y donde muchas veces los productos comerciales no llegan del todo. Para eso, existe otro método casero que combina vinagre con una bomba efervescente limpiadora. ¿Cómo se prepara?
Ingredientes:
Elaboración:
- Se mezclan los ingredientes hasta formar una masa.
- Se moldean 6 bolitas medianas
- Se dejan secar entre 2 y 3 horas
Una vez hechas, se vierte vinagre en el fondo del inodoro y se añade una de las bombas efervescentes caseras para el inodoro que has fabricado. Tras 5 minutos de efervescencia, basta con repasar con la escobilla y tirar de la cadena. El resultado será un inodoro reluciente sin esfuerzo.
3. Para las manchas amarillas: borrador mágico
Debajo del aro del inodoro pueden aparecer manchas amarillas que dan mal aspecto y resultan muy difíciles de eliminar.
Una solución directa y práctica para estas manchas es usar un "borrador mágico" ligeramente humedecido. Este tipo de esponja abrasiva, de color blanco y que puedes encontrar en la mayoría de droguerías y grandes superficies, no necesita más que agua y algo de insistencia.
Frota bien la zona, sin miedo, y luego pasa una bayeta húmeda para retirar los restos. Es mano de santo para las manchas que no salen con nada. El truco está en insistir en movimientos circulares hasta que desaparezcan las marcas.
4. Espuma de afeitar contra el mal olor
Uno de los puntos más olvidados en la limpieza del baño es la parte exterior baja del inodoro, esa zona que está justo donde se une al suelo.
Ahí pueden quedar restos de orina o humedad que generan mal olor. Este se combate con un remedio poco convencional pero muy eficaz: la espuma de afeitar.
Solo hay que aplicarla generosamente en todo el borde inferior del inodoro con la ayuda de un cepillo y dejar actuar durante 10 minutos, luego solo debes retirar con una bayeta húmeda. El resultado es un baño con olor fresco y cero rastros desagradables.
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