La úlcera péptica afecta a la mucosa del estómago y una de cada diez personas la sufre en algún momento de su vida. Se debe a un desequilibrio entre los factores agresivos de la mucosa y los defensivos.

Son agentes agresivos una excesiva secreción de ácido clorhídrico, la presencia de la bacteria Helicobacter pylori, muy frecuente, y los tratamientos con antiinflamatorios.

Descubre 7 consejos para aliviar las úlceras de estómago en el siguiente vídeo.

 

 

Actúan como defensa la secreción gástrica de mucus y bicarbonato, un buen flujo sanguíneo, la reparación natural de la mucosa y la secreción de sustancias que estimulan la formación de mucosa gástrica.

Entre otros síntomas de la úlcera de estómago, la infección por el Helicobacter pylori inflama la mucosa gástrica. Ten en cuenta que esta inflamación provoca una baja o nula secreción del factor intrínseco necesario para poder asimilar bien la vitamina B12.

Dieta contra la úlcera de estómago 

En caso de úlcera evita fritos, ácidos, bebidas con gas, estimulantes como el café y preparaciones demasiado calientes o frías. Además elimina el estrés, ya que reduce el flujo sanguíneo al aparato digestivo.

Alimentos para proteger el estómago

Incorpora estos alimentos a tu dieta si lo que quieres es proteger tu estómago de las úlceras.

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Boniato: protege la mucosa

Los tubérculos actúan como escudos de la mucosa gástrica gracias a su almidón. Además son de muy fácil digestión. Por otro lado, el boniato aporta betacaroteno, precursor de la vitamina A necesaria para la formación de mucosa del estómago.

 

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Col: reduce la acidez

Aunque la col es muy rica en fibra, su alto contenido en glutamina la hace idónea para tratar la mucosa del estómago y la acidez estomacal. Se puede tomar cruda en zumo con manzana para mejorar el sabor. En crudo conserva la vitamina C, necesaria para la cicatrización.

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Remolacha: cicatriza el tejido

La mejor forma de tomar verduras como la remolacha, la zanahoria o la calabaza es en forma de crema. Estas verduras son ricas en betacarotenos y arginina, que ayudan a cerrar la úlcera.

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Alga cochayuyo: alivia las molestias

Es rica en ácido algínico, de propiedades antiácidas. Para que ejerza esta función es necesario dejarla en remojo.

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Hummus: proteína digestiva

El hummus es una gran manera de consumir legumbres, que se digieren mejor. Además el hummus lleva comino, una especia carminativa que también favorece el proceso digestivo. Las legumbres son fuente de proteínas, esenciales para el organismo.

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Aceite de oliva: antiinflamatorio natural

El aceite de oliva virgen extra es rico en tocoferoles y vitamina E, de efecto antioxidante. Es un antiinflamatorio natural y favorece la protección de las mucosas.

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Compota de manzana: fibra protectora

Es un remedio típico por su fácil digestibilidad. La manzana junto con la pera y el membrillo son las frutas más ricas en pectina, una fibra antigastrítica y reparadora que protege la mucosa.

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Calabacín: suave con el estómago

El calabacín es una de las hortalizas indicadas para la úlcera. Se digiere rápidamente, su fibra es soluble, se puede comer cocido o crudo y es muy suave para el estómago.

 

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Zumo de aloe: poder cicatrizante

Se ha demostrado que en pequeñas cantidades el zumo de esta planta, conocida por su poder cicatrizante, suaviza y repara la mucosa estomacal.

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Leche de almendra: rica en calcio y proteína

Es una forma suave de enriquecer la dieta con calcio y proteínas. Si la haces en casa, dejando las almendras en remojo 24 horas y cambiando el agua a las 12 horas, resulta más digestiva. Evita tomar grandes cantidades.

Si lo que tienes es acidez de estómago....

Normalmente la acidez después de comer suele ser por falta de ácido clorhídrico en el estómago. Aunque parezca contradictorio, en estos casos sí es recomendable tomar alimentos de sabor ácido para ayudar a acidificar el pH del estómago y favorecer la suficiente formación de jugos gástricos que ayuden a digerir bien, sobre todo las proteínas.

  • Tomar un poco de agua tibia con zumo de mandarina antes de comer es una buena opción.
  • Aliñar los platos con un poco de vinagre de manzana y completar las comidas con algún fermentado, como chucrut, kimchi o kombucha también te ayudará. Los ácidos orgánicos que se forman en la fermentación favorecen el proceso digestivo.
  • Añadir germinados en las comidas es otra buena medida, pues aportan enzimas digestivas.
  • Antes de comer practica tres respiraciones profundas para activar el sistema nervioso autónomo encargado de la relajación y de informar al cuerpo de que es tiempo de comer.
  • Masticar mucho y comer sin prisas es también básico para garantizar digestiones felices. Dedica al menos 20 o 30 minutos a cada comida y suelta los cubiertos entre bocados.