Los estándares de belleza femeninos actuales marcan una figura tonificada con unos glúteos voluminosos y definidos, por lo que muchas en el gimnasio se marcan ese objetivo para sus entrenamientos. Por eso, las rutinas de glúteos están entre las más demandadas a los entrenadores, quienes se esfuerzan en crear entrenamientos que incluyan este grupo muscular y lo trabajen de diferentes formas.
Por otro lado, uno de los deseos comunes de todos aquellos que comienzan a hacer ejercicio y empiezan a cuidar su alimentación es deshacerse de la barriga para conseguir un vientre plano. Es decir, deshacerse de la grasa abdominal. De hecho, en un afán por mejorar su figura, muchas se marcan el doble objetivo de aumentar el tamaño de sus glúteos y aplanar su abdomen. Sin embargo, la entrenadora personal Sandra Lorden asegura que ambos objetivos no son compatibles. ¿Por qué?
Objetivos opuestos

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Según la experta, se trata de "un tema que genera mucha controversia: la posibilidad de aumentar el tamaño de los glúteos mientras definimos el abdomen". Y es que se trata de objetivos opuestos.
"Para tener un glúteo grande tenemos que construir masa muscular y eso implica hacer un pequeño volumen a través de la alimentación", explica Lorden. Y es que la experta afirma que para aumentar el tamaño de los glúteos, "necesitamos un superávit calórico, es decir, consumir más calorías de las que quemamos".
Sin embargo, la entrenadora asegura que para aplanar la tripa necesitamos todo lo contrario. "Para marcar los abdominales debemos reducir nuestro porcentaje de grasa corporal, y eso se consigue a través de un déficit calórico". Es decir, que para definir el abdomen, necesitamos ingerir menos calorías de las que necesitamos, para que así el cuerpo comience a utilizar sus reservas de energía, sobre todo, grasa.
Entonces, ¿es o no posible tener un glúteo grande y un abdomen plano a la vez?
Cómo conseguir ambos objetivos
Ante tal planteamiento, la experta concluye que "fisiológicamente, son procesos opuestos, así que no va a ser fácil hacer las dos cosas a la vez". Por eso, en lugar de ponernos ambos objetivos a la vez, nos recomienda seguir un plan estratégico para no renunciar a ninguna de las dos cosas y obtener los resultados deseados:
- Fase de volumen: lo primero que tenemos que hacer es "realizar una fase de volumen en la cual será muy importante entrenar fuerza de manera intensa y asegurarnos el aporte correcto de proteínas y carbohidratos complejos".
- Fase de definición: según la experta, "una vez hayamos construido esa masa muscular, podemos pasar a una fase de definición con un déficit calórico progresivo". En esta fase nos recomienda "seguir entrenando tan duro como en la etapa de volumen".
¿vientre tonificado? NO solo con abdominales

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La experta recalca que la idea de hacer miles de abdominales con el objetivo de conseguir el vientre plano deseado es errónea. "El cuerpo no funciona de esta manera, no podemos perder la grasa de manera localizada", recuerda Lorden, que explica que cuando realizamos ejercicio utilizamos como energía la grasa de todas las partes del cuerpo.
Así, la experta afirma que "los abdominales se hacen en la cocina", porque lo que necesitamos es reducir el porcentaje de grasa. Y para perder grasa conservando el músculo hay que hacer un déficit calórico progresivo a través de la alimentación.
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