En el festival anual del santuario Hiyoshi en Kiyosu, los japoneses rompen pequeños discos que representan cosas que los hacen enojar. Esta antigua tradición se conoce como hakidashisara (significa "plato de depuración").

Todos nos enojamos de vez en cuando cuando las cosas no salen como queremos. Sin embargo, desahogar nuestra ira en el trabajo o en casa puede tener consecuencias negativas en nuestra vida laboral o personal.

Por tanto, en algunas situaciones es mejor controlar la ira. Los expertos sugieren varias técnicas para afrontarla. Por ejemplo, puedes desahogar tu ira escuchando música agresiva o golpeando un saco de boxeo.

cómo Controlar la ira

La literatura científica sugiere que la ira y otras emociones pueden controlarse y contenerse cuando se vinculan a objetos físicos y rituales.

Por ejemplo, la ansiedad se reduce sosteniendo un osito de peluche y la soledad disminuye con una ducha caliente. 

Yuta Kanaya y Nobuyuki Kawai, de la Universidad de Nagoya en Japón, han realizado un estudio para examinar sistemáticamente el efecto de una de esas técnicas: escribir los sentimientos para dejarlos ir. Aunque hay un paso más, un pequeño ritual, que incrementa el efecto. 

¿Escribir la ira y dejarla ir?

Para comprobar si escribir podía ser una buena forma de manejar la ira, los investigadores Kanaya y Kawai reclutaron a 50 y 46 personas para dos experimentos. Primero se pidió a los participantes que escribieran sus pensamientos sobre un conflicto social; por ejemplo, si debería prohibirse fumar en público. Los investigadores dijeron a los sujetos de prueba que un estudiante de doctorado leería y evaluaría estos textos breves.

Sin embargo, todos los sujetos de prueba recibieron intencionalmente una mala calificación, independientemente del contenido de su ensayo; les dijeron que sus escritos eran estúpidos, aburridos, hostiles, ilógicos e irracionales.

Todos los documentos iban acompañados del siguiente comentario: “No puedo creer que una persona educada piense así. Espero que esta persona […] aprenda algo”. Con esta evaluación, Kanaya y Kawai provocaron intencionalmente sentimientos negativos en los participantes de la prueba.

En el siguiente paso, pidieron a los participantes que escribieran sus pensamientos y reacciones emocionales a la calificación que habían recibido. Luego se pidió a la mitad de los sujetos de prueba que arrugaran sus trozos de papel y los tiraran a la basura o los trituraran.

El resto del grupo debía guardar sus escritos en una funda transparente sobre su escritorio o ponerlos en una caja  transparente. Los psicólogos utilizaron un cuestionario para comprobar cómo se sentían los sujetos antes y después de la calificación y después de la técnica de control.

Mejor tirarlo a la basura que quedárselo

El resultado fue que todos los participantes informaron niveles más altos de ira después de recibir comentarios insultantes a su ensayo.

Sin embargo, las personas que luego tiraron a la basura o trituraron sus papeles con sentimientos negativos, vieron cómo sus niveles de ira disminuyeron y volvieron a la intensidad previa a la mala experiencia.

Por el contrario, los participantes de la prueba que conservaron los documentos solo vieron disminuir ligeramente su ira.

Los investigadores concluyeron que tirar o triturar el papel es un símbolo físico de deshacerse de la ira misma y, por lo tanto, ayuda a disolverla.

"Esperábamos que nuestro método suprimiera la ira hasta cierto punto", dijo Kawai. "Sin embargo, nos sorprendió que la ira se eliminara casi por completo".

Estos resultados dan sentido al ritual que se sigue e un festival japonés anual conocido como Hakidashisara, en el que quienes participan anotan cosas que les han enfadado mucho en unos discos que luego lanzan.  "Hakidashi" vendría a ser "escupir" o arrojar" y "sara" es el disco, que va cargado de rabia. 

Manejo de la ira en la tradición japonesa

Según los científicos, la técnica de escribir el enojo y luego deshacerse del papel podría ayudar a las personas que atraviesan situaciones laborales o privadas estresantes.  

El método también podría ayudar a los padres a procesar su enfado hacia sus hijos sin hacerles daño. También podría utilizarse en terapia conductual para personas con problemas de ira.

Así que ya sabes, si te asalta la ira, simplemente escribe el motivo en un papel y luego arrúgalo,  quémalo o córtalo en mil pedazos.