Como hija de barcelonesa que soy, la crema catalana es sin duda uno de los postres más vinculados a mi historia familiar. Recuerdo a mi madre frente a un montón de cazuelitas de barro con el quemador de hierro fundido bien agarrado para dejar su impronta sobre el azúcar, ese toque final tan característico que culminaba cuando metías la cuchara y rompías con satisfacción la capa crujiente. Hoy en día las hace menos frecuentemente, pero todavía disfrutamos de ella en ocasiones especiales.

¿Riquísima? Sí. ¿Saludable? No, tanto. Así que hoy te traigo una crema catalana más ligera para que puedas disfrutarla sin remordimientos. Evidentemente no será la misma que la auténtica pero si te ayudará a satisfacer el antojo de dulce. Y para compensar eso, te propongo que te animes con la versión en microondas: tardarás menos y la disfrutarás antes.

Crema catalana ligera en micro

Por su rapidez y comodidad, cocinar en el microondas se ha convertido en el pan nuestro de cada día. Es verdad que hay cosas que quedan mejor en el horno o guisadas a fuego lento, pero hay otras que son de lo más agradecidas y te hacen ganar un tiempo precioso, sobre todo durante la semana. La prueba de ello es que hasta el chef José Andrés lo utiliza para hacer una tortilla en 45 segundos.

La ventaja de hacer la crema catalana en el microondas es que la programas el tiempo que quieres, con lo que ni se pasa, ni se pega ni se quema. En concreto, necesitarás 4 minutos a máxima potencia (800 w), o un poquito más si tu micro es de 700 w. También necesitarás un recipiente apto para este electrodoméstico.

Crema catalana

Para hacer la crema más ligera tendrás que sustituir algunos ingredientes.

iStock

Vamos con las sustituciones para hacerla más ligera. Mientras que la versión normal lleva 60 gramos de azúcar, a esta le añadiremos 1 cucharada de stevia. Por otro lado, también te ahorrarás los 30 gramos que se espolvorean por la superficie para quemarlos posteriormente. En cuanto a la leche, en caso de intolerancia a la lactosa podrías utilizar bebida vegetal de avena.

Ingredientes

  • 500 ml de leche
  • 3 yemas de huevo
  • 1 cuchara de maicena
  • 1 cucharada de stevia
  • 1 ramita de canela
  • Piel de ½ limón

Modo de elaboración

Como para la receta solo necesitas las yemas, aprovecha las claras para hacer un pudin de chía y clara de huevo o también una frittata con claras de huevo, el desayuno salado con más proteína y fibra.

  1. Lo primero que tienes que hacer es poner tres cucharadas de leche en un cuenco y disolver la maicena en ella. Reserva.
  2. Vierte la leche restante con la piel del limón y la canela en un recipiente apto para microondas. Calienta 4 minutos echando un vistazo de vez en cuando. 
  3. Aprovecha mientras tanto para batir las yemas con la stevia. Incorpora la leche con maicena y mezcla bien. Vierte entonces la preparación con la leche caliente muy poco a poco sin dejar de remover. 
  4. Calienta en el microondas durante 2 minutos. Remueve con varillas y vuelve a calentar otros 2 minutos. Reparte en las cazuelas de barro y deja que se temple.
  5. Tapa entonces con papel film transparente: la idea es que el film se pegue a la superficie para evitar así que le salga "costra". Refrigera hasta el momento de servir. 
  6. Si se tratara de una crema catalana normal, este sería el momento de espolvorear azúcar y quemar con un soplete de cocina. La alternativa sería mezclar una cucharada de agua caliente, una pizca de stevia y otro de gelatina en polvo. Pinta la crema con este almíbar y decora con canela en polvo para simular el quemado.

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