Hoy en día, los hornos suelen tener numerosas funciones que se identifican con diferentes símbolos: convección, grill, aire caliente, calor superior y/o inferior, pirólisis y mucho más. Si solo horneas de vez en cuando, es fácil que no conozcas los símbolos ni lo que implican a nivel de gasto energético.

Elegir el programa adecuado no solo es importante para el resultado de las recetas, sino que puede ahorrar energía. Hasta 10% del consumo de electricidad se produce al cocinar y hornear. Te mostramos qué significan los símbolos de cada horno y cómo puedes ahorrar energía.

Significado de los símbolos del horno

Existen numerosos símbolos en los hornos y no todos los aparatos tienen todas las funciones. Puedes encontrar estos símbolos en tu horno:

  • Ventilador: aire, pero sin calor
  • Ventilador en un círculo: aire caliente
  • Una línea recta arriba: calor superior
  • Una línea recta debajo: calor inferior
  • Líneas rectas arriba y abajo: calor superior e inferior
  • Línea dentada arriba: Grill (desde arriba, mucho más fuerte que el calor superior)
  • Línea recta abajo y abanico en círculo: modo pizza
  • Ventilador y línea dentada arriba: aire forzado y parrilla
  • Línea dentada arriba, ventilador, línea recta abajo: parrilla de convección con calor inferior.
  • Varios círculos pequeños: pirólisis (autolimpieza)
  • Tres olas como nubes: cocción al vapor
  • Lámpara: luz en el horno (sin función de horneado)

La función de ventilador simple combina el calor superior e inferior con un ventilador que distribuye el calor por todo el horno. En cambio, el ventilador con un círculo significa que primero se calienta el aire y luego este se introduce en el horno. Esta modalidad permite una cocción más uniforme, en un tiempo más corto y con menor consumo de energía. También puedes usar varias bandejas al mismo tiempo porque el calor se distribuye uniformemente en el horno. Esto también ahorra tiempo y electricidad.

Recomendaciones para ahorrar energía en el horno

  • En general, se recomienda hornear con aire caliente o aire circulante, si es posible. Con ambos programas, sobre todo cuando se calienta previamente el aire, el calor se distribuye uniformemente. Normalmente no es necesario precalentar y se ahorra electricidad.
  • Puedes configurar tu horno de 20 a 30 grados más bajo que con calor superior/inferior. El aire caliente y el aire circulante son especialmente adecuados para pizzas, galletas y otras masas finas.
  • Con la función pizza disponible en algunos hornos (aire caliente + calor inferior), por ejemplo, las bases de pizza o tarta flambeada se hacen más crujientes.
  • El calor superior/inferior no es el más eficiente energéticamente. Sin embargo, la función es adecuada para pasteles de hojaldre y pasteles de queso que deben permanecer húmedos (el aire los secaría).
  • El calor superior o la parrilla son efectivos cuando deseas gratinar algo o agregar más color a un pastel terminado.
  • Si tienes un horno pirolítico, puedes recurrir a la autolimpieza. En este modo el horno se calienta a una temperatura muy alta y los restos de suciedad se queman hasta hacerle literalmente polvo, que se puede retirar fácilmente. Cada vez que se utiliza puede suponer un consumo cercano a los dos euros y representa un derroche de energía.
  • La cocción al vapor se considera saludable porque los alimentos se cocinan suavemente. Sin embargo, es mucho más eficiente desde el punto de vista energético cocinar los alimentos en una cacerola de vapor tradicional.

 

7 formas de ahorrar electricidad con el horno

El horno consume mucha electricidad, pero puedes reducir el consumo de energía con estos consejos:

  1. Precalienta el horno solo cuando sea necesario. Un hojaldre fino o un poco de pan necesitan mucho calor desde el principio; de lo contrario, el precalentamiento del horno no suele ser necesario y así se puede ahorrar hasta un 20% de energía.
  2. Aprovecha el calor residual del horno apagándolo antes.
  3. Evita abrir el horno antes de que la comida esté lista. Porque cada vez se escapa calor y hay que recalentar el horno.
  4. Considera si realmente necesitas usar tu horno. Puedes usar una tostadora, por ejemplo, para hornear panecillos individuales que no estén ultracongelados o simplemente necesiten un toque crujiente, usando menos energía.
  5. Puedes hornear casi cualquier cosa con los modos de aire y aire caliente. Esto ahorra electricidad en comparación con las otras funciones del horno. También puedes usarlo para hornear varias bandejas al mismo tiempo. Por lo general, no es necesario precalentarlo, así puedas ahorrar electricidad.
  6. Los hornos modernos tienen un programa de ahorro de energía. Este programa realmente ahorra electricidad, pero puede tener un efecto negativo en el resultado del horneado, porque la temperatura no se mantiene estable, lo que puede arruinar un suflé, por ejemplo.
  7. El "calentamiento rápido" es otra función adicional en algunos hornos modernos. En esta función el horno se calienta más rápido, pero eso apenas ahorra electricidad.