La salvia es una hierba aromática muy versátil en la cocina con un peculiar aroma, intenso y terroso.  Como para emplearla en la cocina se necesita muy poca cantidad, lo más práctico para disponer de ella es contar con una planta en una maceta o en el jardín, e ir tomando las pocas hojas que se necesitan en el momento de preparar las recetas. Ahora bien, la planta de salvia echa muchas hojas y se les puede sacar mucho más partido.

Aunque su uso culinario es bien conocido, lo es mucho menos su uso en la cosmética natural casera. Sus propiedades para la piel y el cabello, especialmente su poder desodorizante y suavizante, hacen que merezca la pena aprender a incorporarla en tus rutinas de belleza.

Baño de pies con salvia contra el sudor

Se puede preparar en poco tiempo una sal de baño nutritiva a partir de sal marina y plantas aromáticas frescas como la salvia. Si sufres de pies sudorosos, puedes aprovechar los principios activos de esta planta con un baño de pies. Para hacerlo, procede de la siguiente manera:

  1. Echa agua hirviendo sobre unas ramitas de salvia en un bol y déjalo tapado durante 15 minutos.
  2. Cuela la mezcla en un balde suficientemente grande de agua tibia.
  3. Remoja los pies durante un cuarto de hora.

Desodorante en spray con salvia

Su efecto antibacteriano tambiénconvierte la salvia en un ingrediente ideal para desodorantes en spray.

Ingredientes (para 100 ml de desodorante):

  •  Un puñado de salvia
  • 5 gotas de aceites esenciales (opcional)
  • 50 ml de alcohol (al 96%)
  • 50 ml de agua
  • Un pulverizador para la aplicación

Elaboración:

  1. Pica las hojas de salvia y colócalas en un frasco con tapa de rosca hasta llenar dos tercios.
  2. Rellena el frasco con el alcohol y ciérralo bien.
  3. Deja reposar el frasco en un lugar cálido y soleado durante cuatro semanas. El proceso de envejecimiento requiere algo de paciencia.
  4. Agítalo suavemente con regularidad, preferentemente a diario, para que los principios activos se disuelvan mejor.
  5. Una vez que el extracto haya madurado, cuela las partes de la planta a través de un filtro de café, agrega la tintura a tu difusor y completa con los 50 ml de agua.
  6. Agrega aceites esenciales y agita bien antes de cada uso.

Este desodorante tiene una vida útil muy larga. Sin embargo, debe usarse antes de que transcurra un año, ya que poco a poco se pierde la eficacia de los principios activos.

Acondicionador para cabello graso

Si tiendes a tener el cabello graso, un acondicionador con salvia puede ayudarte. Para prepararlo solo necesitas un puñado de salvia fresca y un cuarto de litro de agua.

Elaboración:

  1. Limpia la salvia y colócala en un recipiente resistente al calor.
  2. Lleva el agua a ebullición y viértela sobre la salvia.
  3. Deja reposar la infusión durante unas horas y luego cuélala.
  4. Vierte la infusión terminada en medio litro de agua tibia.
  5. Aplícala sobre el cabello y el cuero cabelludo inmediatamente después del champú y no enjuagues.

Debido al efecto ligeramente colorante de la decocción de salvia, este acondicionador también es adecuado para hacer desaparecer de forma natural las primeras canas.

Por esa misma razón, no debes usarlo en cabellos rubios. Si tienes el cabello claro, es más recomendable una decocción con flores de manzanilla.

aceite de salvia casero de doble uso

Con las hojas de salvia puedes aromatizar un buen aceite de oliva que podrás aprovechar tanto en tus recetas como para el cuidado de la piel. 

En la cocina, este aceite aromático es ideal para aliñar platos picantes. Un plato de pasta con un poquito de guindilla y este aceite despertará todos tus sentidos. Pero también puedes utilizarlo en ensaladas, verduras asadas, pizzas y 

Sobre la piel, el aceite de salvia te aportará las propiedades nutritivas del aceite de oliva junto a las propiedades regeneradoras y calmantes de la salvia. 

cómo hacerlo paso a paso

Si te gusta usar la salvia para condimentar tus platos, vale la pena que prepares aceite de salvia.

Ingredientes:

  •  250 ml de aceite de oliva virgen extra
  •  30-40 g de hojas frescas de salvia

Elaboración:

  1. Lava la salvia y sécala bien.
  2. Pica las hojas en trozos grandes.
  3. Coloca las hojas en un frasco con cierre hermético y vierte el aceite por encima. Las hojas trituradas deben quedar completamente cubiertas.
  4. Déjalas en un lugar oscuro durante dos semanas.
  5. Filtra la salvia y vierte el aceite en una botella limpia.