El diseño de un huerto urbano en macetas se basa en adaptar espacios dentro de la misma vivienda para combinar el cultivo de hortalizas, hierbas aromáticas, pequeños frutales y plantas ornamentales.

Como el espacio para cultivar en una ciudad a menudo es un factor limitante, el diseño y la distribución de las jardineras es clave para que le saques el mejor partido.

Distribución de las macetas o jardineras

En ese contexto, es importante que descubras todas las posibilidades de incorporar elementos propios del medio rural a un espacio limitado como son los balcones, las terrazas o los patios.

Seleccionados los sectores donde ubicarás las jardineras, empieza a evaluar cuidadosamente la orientación, las condiciones meteorológicas y los pesos admitidos para cada lugar.

Para facilitar esta etapa, es aconsejable que recurras a elementos que se consigan fácilmente en el mercado o que puedas fabricar tú mismo. Reciclar y reutilizar también pueden ser la clave.

maceta o jardinera: cómo elegir su material

A la hora de elegir las macetas y las jardineras es importante valorar el peso, el material de fabricación y el costo.

  • Arcilla/barro cocido/ladrillo: Es un material poroso y muy estético. Sus desventajas son el peso y su fragilidad.
  • Materiales plásticos: Son muy ligeros, resistentes y económicos, pero son impermeables al paso de aire en la zona de las raíces.
  • Madera plástica: Soporta grandes volúmenes de sustrato. Es muy estética ya que imita a la madera, pero también impide el paso de aire. Es un material reciclado muy resistente a los rayos UV.
  • Fibrocemento: Con este material se fabrican las jardineras de mayor capacidad, son pesadas, pero estratégicamente ubicadas en las zonas de más resistencia de terrazas y balcones son adecuadas para el cultivo de plantas grandes como las tomateras de crecimiento indeterminado, los pepinos o los frutales pequeños.
  • Metálicas: Son en general de aluminio galvanizado y diseño moderno. Son impermeables al paso del aire y en verano el sustrato puede calentarse mucho estando al sol directo.
  • Madera: Muy estéticas, duraderas y resistentes. Requieren cuidados de mantenimiento a lo largo del tiempo.
  • Tela: Son muy livianas y adaptables. Están fabricadas con un material poroso obtenido del reciclado de botellas plásticas, que genera el fenómeno de “poda por aire” de las raíces. Al llegar las raíces a las paredes de la maceta, en lugar de enrularse, se produce esta poda que incrementa el número de raíces secundarias, aumentando la capacidad de absorción de agua y en consecuencia de los nutrientes disueltos en ella. Con raíces sanas, se acelera el crecimiento vegetal. Para colocar un plantel, no es necesario que coloques una capa de drenaje en el fondo, sino que lo llenas directamente con el sustrato. En este orden: sustrato, plantel y más sustrato. Exigen mayor frecuencia de riegos ya que el agua se evapora por la pared de tela. Una vez terminado el cultivo, se vacían, se enjuagan bien, se secan al aire y ya estarán listas para un nuevo ciclo.

Como ves, cada material tiene ventajas y desventajas que son importantes que conozcas antes de decidir que comprar.

Porosidad y permeabilidad de las macetas

Las macetas o tiestos de barro cocido presentan una porosidad que será variable dependiendo del tipo de arcilla con que fueron fabricadas. La evaporación del agua en la cara externa de la maceta crea una succión que provoca la transferencia del agua desde el sustrato hacia el exterior. Este paso de agua no es nada despreciable, especialmente en verano en ambientes secos y con elevada temperatura. Los depósitos de sales que observas en la cara exterior de este tipo de maceta son la evidencia de esta transferencia.

Los materiales plásticos no son ni permeables ni porosos. El riego va a depender en gran medida del tipo de pared de los contenedores y de las condiciones ambientales.

La salud de las raíces, y por ende de las plantas, también va a depender de la circulación de aire en el sustrato. En general, las mezclas son muy porosas, pero cuando el sustrato no está lo suficientemente aireado, las raíces se ubican en la parte superior de la jardinera, más rica en aire. Cuando su desarrollo horizontal se ve impedido por la pared de la maceta, las raíces se desarrollan preferentemente en la interfaz sustrato/pared. Este fenómeno lo observas fácilmente cuando renuevas los cultivos anuales: el sustrato se ha compactado y hay una gran masa de raíces rodeando todo el cepellón.

macetas grandes o pequeñas: cuál conviene

Jardineras y macetas tienen que tener una capacidad que permita el crecimiento saludable de las raíces de las plantas.

  • En macetas de 0.30 m de profundidad, podrán desarrollarse: rúculas, rabanitos, lechugas, canónigos, ajos y cebollas tiernos, puerros, pimientos ornamentales, cebollino, albahaca y perejil. Esa profundidad te garantiza disfrutar de las ensaladas y el cultivo de la mayoría de las plantas aromáticas.
  • Si tienes posibilidades de incorporar jardineras de 0.50 m de profundidad, las acelgas, remolachas, brócolis, repollos, coliflor, zanahorias, tomates, pimientos, berenjenas, pepinos, judías verdes, guisantes, espinacas, kales y la mayoría de las verduras con raíces voluminosas crecerán cómodas y saludables.

Las jardineras grandes y llenas con sustrato y plantas son muy pesadas. Por esta razón, es importante conocer la resistencia de cada balcón. Los sectores cercanos a la pared son los de mayor resistencia, ahí deberías ubicar las jardineras más pesadas y reservar los bordes para las macetas más livianas. En las terrazas, los bordes son los espacios más resistentes. El peso admisible en terrazas es de unos 200 kg/m2.

Impermeabiliza correctamente la terraza, ya que un huerto en macetas es un espacio constantemente húmedo. El mercado te ofrece múltiples opciones desde pinturas hasta sistemas aislantes más complejos.