La recta final del estío nuestro cuerpo puede mostrarse más vulnerable a catarros, estados gripales e infecciones diversas.
El sistema inmunitario dispone de anticuerpos específicos o inmunoglobinas, que circulan a través de la sangre y brindan la llamada inmunidad humoral, y de una inmunidad a nivel celular que proporcionan los linfocitos o glóbulos blancos.
Los linfocitos son segregados por el timo, que resulta muy vulnerable al ataque de los radicales libres y que disminuye su eficacia con la edad.
Una alimentación rica en vitaminas y minerales y el apoyo de determinadas plantas puede favorecer la acción de los linfocitos y ayudar a encarar la época fría con garantías de salud.
Algunas plantas se consideran grandes estimulantes inmunitarios. Es el caso de la equinácea, el ginseng, el eleuterococo, el regaliz, la uña de gato y la schisandra.
En este vídeo te contamos cómo preparar un jarabe de cebolla para aliviar el catarro y la gripe:
5 remedios naturales que refuerzan la inmunidad
En este artículo sin embargo hemos querido destacar otras cinco plantas, algunas no tan conocidas pero igualmente eficaces.