Sentir de repente que el todo se mueve o gira a tu alrededor (cuando en realidad está quieto), tener inestabilidad, náuseas y una sensación como de estar borracho puede deberse al vértigo.

Se trata de una alteración del sistema vestibular (el encargado de controlar el equilibrio y la postura, coordinar los movimientos y fijar la mirada) que el 80% de los españoles ha sufrido al menos una vez en su vida, de acuerdo con la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC). En este artículo te explicamos las diferencias entre el vértigo periférico y el vértigo central y cómo saber si los vértigos son del oído analizando los síntomas.

¿Vértigo periférico o vértigo central?

El vértigo y el mareo se consideran alteraciones del equilibrio pero, aunque puedan parecer muy similares, sus síntomas y causas son diferentes y no hay que confundirlos. Mientras que el vértigo tiene que ver con el sistema vestibular y provoca una sensación irreal de movimiento de las cosas o de uno mismo (como una alucinación de movimiento), el mareo consiste en una sensación general de desequilibrio.

  • El sistema vestibular está situado en la parte interna del oído y su centro neurológico está en el tronco del encéfalo.

Existen dos tipos distintos de vértigo, uno relacionado con la estructura del oído interno y otro con el cerebro.

Vértigo periférico

El vértigo periférico es el más común y tiene que ver con lesiones en el propio oído interno y el nervio vestibular (que lleva la información del oído interno al cerebro).

Aunque sus causas en su gran mayoría son benignas, puede alterar mucho la calidad de vida de las personas que los sufren. Las patologías asociadas al vértigo periférico más frecuentes son el vértigo posicional paroxísitico benigno (VPPB), la neuritis vestibular y la enfermedad de Ménière. De acuerdo con la Clínica Universidad de Navarra, estas tres patologías representan el 54% de las consultas por mareo y vértigo.

El vértigo periférico también puede aparecer por otras causas como un tumor que presione la zona, lesiones o infecciones.

Vértigo central

El vértigo central afecta a los mecanismos neurológicos del sistema vestibular y se debe a lesiones en el tronco encefálico o la parte posterior del cerebro (cerebelo).

Las causas del vértigo central más frecuentes son las enfermedades vasculares (como un ictus) y la esclerosis múltiple. También puede deberse tumores en algunas zonas del cerebro, migraña vestibular, epilepsia...

Cómo saber si los vértigos son del oído: síntomas

Los síntomas del vértigo son imprevisibles y pueden aparecer en cualquier momento del día o de la noche, ya sea estando en reposo o realizando alguna actividad. Los síntomas pueden darte pistas de si el vértigo que sufres es por un problema en el oído interno (vértigo periférico) o en el cerebro (vértigo central)

  • En el caso del vértigo del oído, el periférico, los principales síntomas son la aparición súbita de una sensación intensa de movimiento, como si estuvieras dando giros o tu entorno diera vueltas a tu alrededor. También puede haber náuseas, vómitos, palidez, nistagmo (movimiento involuntario de los ojos) hacia una dirección que desaparece al fijar la vista, pérdida de audición, zumbidos o dolor en el oído.​
  • En el vértigo central, en cambio, puede que no se perciba una sensación de dar giros, sino más bien de inestabilidad, mareo, debilidad o problemas para caminar. El nistagmo que se produce en este tipo de vértigo es en múltiples direcciones y no desaparece al fijar la vista. También puede haber cefaleas intensas y signos neurológicos como visión doble, trastornos de la conciencia o de la deglución, etc.

Normalmente, los ataques de vértigo no duran más de unos minutos. Sin embargo, en casos graves, el vértigo puede durar horas, días, semanas o incluso meses.

¿Cómo se cura el vértigo del oído?

El tratamiento del vértigo, ya sea de origen cerebral o en el propio oído interno, depende siempre de la su causa y es importante acudir al médico para poder tener un diagnóstico lo antes posible. El tratamiento puede incluir el uso de medicamentos (por ejemplo, si la causa es una infección) o, en algunos casos raros, cirugía.

Si el vértigo es debido a un problema en el oído interno, la rehabilitación vestibular puede ayudar a reducir los síntomas. Se trata de un tipo de fisioterapia que ayuda a fortalecer los otros sentidos para que puedan compensar los episodios de vértigo.

Además, la cúrcuma, el ginkgo biloba o la raíz de jengibre son remedios populares que puden ayudar a aliviar los síntomas del vértigo.

Ten en cuenta también estos consejos para evitar lesiones cuando se produzca el episodio de vértigo.

  • Cuando notes los primeros síntomas de vértigo, siéntate o estírate.
  • Busca ayuda para aguantarte o caminar.
  • Una vez sientas que ya ha pasado el episodio, no te levantes de golpe, hazlo lentamente y con movimientos suaves.