Los niños viven en un mundo apresurado de padres demasiado ocupados, deberes escolares, actividades extraescolares y, sobre todo, entretenimiento asociado a las pantallas.
Por lo general, no pensamos en que todas esas influencias puedan estresar a los niños. Creemos que si están ocupados, están bien, pero el conjunto de actividades que los niños hacen puede ser agobiante.
En el peor de los casos, los niños pueden responder con muestras de cansancio, irritabilidad, dificultades de concentración e, incluso, falta de alegría.
Es obvio que debemos cuidar la agenda de los niños y dejarles tiempo libre para jugar a su aire, para realizar actividades creativas y manuales e, incluso, para aburrirse.
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Los beneficios del yoga para los niños
La práctica del yoga puede compensar las presiones que inevitablemente sufren. Cuando los niños aprenden técnicas para la relajación y la realización interior, pueden afrontar los desafíos de la vida con un poco más de facilidad.
Fomenta la cooperación y la compasión, en lugar de la oposición y la competición, lo que es un auténtico regalo para los niños. Además, les resulta muy divertido.
Los niños obtienen enormes beneficios del yoga: mejora su flexibilidad, fuerza, coordinación y conciencia corporal. Además, favorece la concentración y la sensación de calma y relajación.
Al hacer yoga, los niños hacen ejercicio, juegan, se conectan más profundamente consigo mismos y desarrollan una relación con el mundo natural que los rodea. Sobre todo, el yoga trae a la superficie esa maravillosa luz interior que todos los niños tienen.
En un artículo publicado por en el International Journal of Physical Education & Sports Sciences se enumeran los beneficios del yoga en los niños:
- Fortalece los cuerpos en desarrollo
- Mejora la concentración
- Aumenta la autoestima
- Enseña la conciencia presente
- Desarrolla un estado mental y corporal tranquilo y cómodo
- Proporciona estrategias para la gestión del estrés
- Cultiva la imaginación y la creatividad
- Fomenta las buenas relaciones con otros niños y adultos
- Mejora la sensibilidad corporal
- Enseña autocontrol
"El yoga es una gran herramienta para los niños con beneficios desconocidos que, en muchos aspectos, tendrán un efecto profundo en su vida y su potencial", escribe el autor del estudio, Vichitra Kumar.
¿Cómo empezar a hacer yoga con niños?
El origen de las posturas del yoga está en el ejemplo de las plantas y animales, que fueron observados por los primeros yoguis. Por eso a los niños les resulta tan natural, sencillo y divertido empezar a practicar con las posturas que más claramente reproducen los gestos de los animales.
Cuando adoptan la postura del león (simhasana), por ejemplo, experimentan no solo el poder del león, sino también su propio sentido de poder: cuándo mostrarse imponente y cuándo retirarse.
Por supuesto, el yoga con niños es diferente al yoga con adultos. Es necesario adaptarse a su espontaneidad, seguir sus preferencias y dejar que dirijan la sesión, proponiéndoles elecciones. ¿Qué prefieres, la postura de la vaca (bitilasana) o la del árbol (vrksasana)? ¿La del guerrero (virabhadrasana) o el cuervo (bakasana)?
Cuando adoptan la postura del perro pueden ladrar si quieren o silbar al componer la cobra (bhujangasana). Introducir juegos, cuentos y tambores en la sesión también hace que les resulte más interesante y divertida.
El reto es que entre una cosa y otras los niños aprendan a mantener durante unos segundos las posturas en estado de concentración, paz y bienestar.
No es necesario ser rigurosos ni exigirles nada para que adopten la postura correcta. El ejemplo del acompañante les basta para querer hacerlo tan bien como él.
¿A qué edad se puede empezar a hacer yoga?
Una de las grandes ventajas del yoga es que puede ser practicado por niños de todas las edades.
- Para los más pequeños (de 4 a 6 años), el yoga crea un marco para el movimiento corporal total y el desarrollo motriz.
- Los niños de 7 a 9 años se benefician del yoga al desarrollar las habilidades motoras generales al enfrentarse a desafíos de fuerza, agilidad y resistencia, así como de cooperación.
- Para los preadolescentes y adolescentes (de 10 a 14 años) el yoga es una actividad integral segura que les permite continuar su desarrollo físico y mental mientras sus cuerpos experimentan cambios asombrosos y sus conexiones con sus compañeros sociales se fortalecen.
Referencias científicas:
- Vichitra Kumar. A Study on the Importance of Yoga for Children’s. International Journal of Physical Education & Sports Sciences
- Galantino et al. Therapeutic Effects of Yoga for Children: A Systematic Review of the Literature. Pediatric Physical Therapy.
- Henningsen K. The Benefits of Yoga for Children. Kaplan University.
- Nanthakumar C et al. The benefits of yoga in children. Journal of Integrative Medicine.