Los árboles siempre han despertado una atracción especial entre los humanos, ya sea por sus deliciosos frutos, su apariencia a menudo impresionante o sus propiedades curativas. El sauce es uno de los grandes árboles de la cultura occidental, ha sido un árbol mágico y un símbolo de la eternidad, porque tiene la capacidad de renovarse constantemente (un árbol nuevo puede emerger de una rama rota enterrada). De su corteza se extraen remedios eficaces con propiedades antipiréticas, analgésicas y antiinflamatorias.

Existen más de 400 variedades de sauce, que se han adaptado en todos los confines de la Tierra, ya sea en la zona templada de Europa Central, en los trópicos de Suramérica o en el extremo norte del Ártico.

Algunos son pequeños arbustos enanos de tres centímetros, otros son árboles gigantes de hasta 30 metros de altura.

En Europa, tres tipos de sauces son plantas medicinales: el sauce dafnoide (Salix daphnoides), el sauce blanco (Salix alba) y el sauce colorado (Salix purpurea). De estos árboles se utilizan las hojas y flores, pero sobre todo la corteza seca de las ramitas de 2 a 3 años en forma de infusiones y extractos.

Propiedades de la corteza de sauce

La corteza de sauce (Salicis cortex) combina propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Se descubrieron en la Edad de Piedra y el conocimiento valioso del poder del sauce se ha transmitido de generación en generación hasta nuestros días.

Las fuentes históricas más antiguas proceden del antiguo Egipto. Los jeroglíficos en tabletas de arcilla hablan de fórmulas de corteza de sauce contra la inflamación, las heridas dolorosas y las hinchazones.

Hipócrates de Kos, padre de la medicina occidental, prescribía infusiones de corteza de sauce contra la inflamación de las articulaciones o la fiebre.

Los teutones y celtas hervían ramitas de sauce y hacían envolturas para tratar las extremidades doloridas o las heridas que cicatrizaban mal.

En la Edad Media, los médicos viajeros, las parteras, los pastores y los tejedores de cestas, que sacaban su materia prima del sauce púrpura, estaban muy familiarizados con el uso de la corteza de sauce.

El padre de la aspirina

A principios del siglo XIX, los químicos finalmente aislaron en el laboratorio el principal ingrediente activo de la corteza de sauce: la salicina. Como la sustancia aislada no era prometedora como remedio y la materia prima era cara, los químicos inventaron la manera de producir sintéticamente una sustancia similar, el ácido salicílico.

Fue el primer medicamento envasado y producido industrialmente en el mundo, aunque desde el primer momento se conoció su tendencia a favorecer las hemorragias internas. En 1897, el químico Felix Hoffmann sintetizó el conocido ácido acetilsalicílico a partir del ácido salicílico, en un laboratorio de Bayer. Esta sustancia tenía menos efectos secundarios y su efecto se parecía al de la corteza de sauce. Pronto conquistó el mundo bajo la marca Aspirina.

Casi sin efectos secundarios

A diferencia del ácido acetilsalicílico, la corteza de sauce tiene pocos efectos secundarios. Los extractos de corteza de sauce no tienen un efecto anticoagulante y, por lo tanto, se puede usar para tratar el dolor antes y después de las operaciones.

Un estudio en el Centro Médico Rambam en Israel ha demostrado que el uso diario de extracto de corteza de sauce (240 miligramos de salicina) no provoca mayor tendencia a sangrar.

Las preparaciones de corteza de sauce utilizadas en los estudios son generalmente bien toleradas, con efectos secundarios leves que solo ocurren en del 5 al 10 % de los casos, casi igual que en los grupos de placebo.

La hipersensibilidad a los salicilatos puede provocar urticaria, asma, secreción nasal y broncoespasmo (calambres en los músculos que rodean las vías respiratorias), pero solo dos de cada mil europeos se ven afectados.

El sauce es una fórmula compleja

A diferencia del ácido acetilsalicílico, la corteza de sauce no contiene uno, sino numerosos ingredientes activos que se influyen entre sí para producir el efecto terapéutico.

Además de la salicina, la corteza de sauce contiene derivados de la salicina como salicortina, tremulacina y populina, cuya composición varía en función de la variedad de sauce.

Pero para lograr la eficacia deseada de la corteza de sauce, el contenido de salicina debe ser al menos del 1,5%.

También contiene compuestos que se encuentran en otras plantas, como los flavonoides isoquercitrina, kaempferol y quercetina, que posee efectos antioxidantes, antiinflamatorios y preventivos del cáncer.

La corteza de sauce ayuda con la artrosis de rodilla y cadera mejor que los medicamentos

En un estudio realizado en la Universidad del Ruhr se examinaron cuidadosamente la tolerancia y el efecto del extracto de corteza de sauce en el tratamiento de las artrosis de rodilla y cadera, en comparación con los medicamentos convencionales (por ejemplo, analgésicos sintéticos).

90 pacientes fueron tratados con extracto de corteza de sauce y 41 pacientes recibieron la terapia estándar. 8 personas fueron sometidas a un tratamiento combinado. Después de 3, tanto los pacientes como los médicos consideraron equiparables los tratamientos con corteza de sauce y con medicinas. Pero después de 6 semanas, la terapia con corteza de sauce se calificó como mejor que el tratamiento convencional. El extracto de corteza de sauce no funcionó tan rápido, pero los pacientes lo toleraron bien porque no presentó ningún efecto secundario.

Los investigadores llegaron a la conclusión de que el extracto de corteza de sauce es adecuado para la artrosis de rodilla y cadera leve y grave y funciona tan bien como las terapias médicas convencionales.

La corteza de sauce es mejor opción para aquellos pacientes que dependen constantemente de los analgésicos, debido a sus graves dolencias.

Existen diferentes formas de preparar o ingerir la corteza de sauce seca o en polvo. La dosis diaria media es de unos 5 gramos de corteza de sauce, que contiene unos 45 mg de salicina total. En muchos casos es necesaria una dosis más alta.

Referencias científicas: