El tomillo se utiliza desde la antigüedad tanto para elaborar remedios curativos como para utilizarlo en la cocina, como aromatizador o como conservante de alimentos en despensas y frigoríficos. Sin embargo, los usos del tomillo son innumerables. ¿Le estás sacando todo el partido que podrías? Te contamos cómo usarlo de 20 maneras distintas y aprovechar todas sus propiedades.

Las 20 formas de usar el tomillo que no conocías

El tomillo contiene un aceite esencial, con proporciones de timol, carvacrol, geraniol, cineol y otras sustancias aromáticas, así como flavonoides, ácidos fenólicos –ácido rosmarínico–, saponinas y taninos en abundancia. La esencia le aporta sus propiedades estimulantes, balsámicas, digestivas, carminativas, coleréticas, antisépticas y antiespasmódicas; y los ácidos fenólicos y los flavonoides refuerzan su acción antiséptica, diurética y depurativa.

Por esta razón, el tomillo ocupa un lugar preferente en el marco de los remedios herbarios por sus notables beneficios sobre la salud. Descubre cómo utilizarlo en 20 situaciones distintas:

Y en el siguiente vídeo tienes, además, tres infusiones que funcionan:

  1. Indisposiciones digestivas: El tomillo alivia las digestiones pesadas, los espasmos gastrointestinales y la gastritis, y evita la formación de gases y flatulencias. Se toma en infusión simple o combinada –dos tazas al día–, en maceración en vino blanco y en tintura o jarabe. Como has visto en este vídeo puedes usar el tomillo también contra la diarrea.
  2. Afecciones respiratorias: Los catarros, procesos gripales, faringitis, laringitis, sinusitis, bronquitis y procesos alérgicos pueden aliviarse tomando una infusión de tomillo, sola o combinada con plantas que refuercen su acción -hasta tres tazas diarias-, o bien en jarabe, tintura y cápsulas.
  3. Dolor de garganta: Contribuye a aliviar la tos irritativa y la afonía, y descongestiona las vías respiratorias. Para ello se pueden realizar gargarismos a partir de su decocción simple, acompañada de zumo de limón y miel, o bien en vahos.
  4. Parásitos intestinales: Se toma en infusión, decocción, maceración, tintura, o bien se aplica en lavativa.
  5. Astenia, debilidad y convalecencia: Se administra en infusión, basta dos tazas al día, o en tintura.
  6. Hepatoprotector: Estimula la producción de bilis y protege las funciones del hígado, puesto que es un buen depurativo y desintoxicante. Se toma en infusión, tintura y en gotas de extracto líquido.
  7. Tensión menstrual y dolor muscular: Se toma en infusión, tintura o en gotas de extracto fluido.
  8. Infecciones urinarias: Su infusión puede aumentar la emisión de orina y constituye un buen depurativo, ya que favorece la eliminación de toxinas.
  9. Dolores musculares: El tomillo puede aliviar contracturas musculares, lumbalgias, esguinces, ciáticas ... Basta con aplicarlo en forma de linimento o pomada, en decocción o maceración en alcohol de 96 º sobre la zona dolorida o bien en gotas de aceite esencial mezcladas con aceite vegetal. El aceite también se utiliza para practicar un masaje o para añadir en el agua del baño.
  10. Conjuntivitis alérgicas y rinitis: Se aplica en forma de baños locales y colirios.

Otros usos sorprendentes del tomillo

  1. Afecciones bucales: Alivia el dolor de muelas y combate las infecciones. Se pueden realizar gargarismos o colutorios a partir de la infusión de la planta seca.
  2. Heridas: Se aplica en oleato o decocción para impregnar la zona afectada, siempre que la lesión sea leve.
  3. Hongos y verrugas: Se aplica un linimento de tomillo o de oleato (tomillo macerado en aceite de almendras dulces).
  4. Caída del cabello: Previene su caída y fortalece el cuero cabelludo. Se aplica en loción o alcoholato con un masaje capilar.
  5. Contra la tos: A partes iguales, se combina el tomillo con amapola, malva e hinojo. Se toma una cucharada sopera de la mezcla por cada taza. Se hierve dos minutos, se deja en reposo y se cuela. De esta tisana, que se puede endulzar con miel de tomillo, se pueden tomar hasta dos tazas al día, en ayunas.
  6. En caso de intoxicación alimentaria: Se mezclan, a partes iguales, tomillo, ortiga y llantén mayor. Se toman dos cucharadas soperas por medio litro de agua y se infusionan. El preparado se bebe a lo largo el día.
  7. Dermoprotectora y cicatrizante: Se mezclan a partes iguales tomillo, milenrama, rabo de gato y caléndula. Se hierven 40 g de la mezcla en 500 mi de agua. Se deja reposar el preparado, se cuela y, con una gasa, se reparte sobre la herida.
  8. Para mejorar la digestión. El intenso aroma del tomillo y su acción digestiva son la mejor carta de presentación para formar parte de muchas recetasEn rama o pulverizado el tomillo se ha empleado generosamente en la cocina tradicional para perfumar ensaladas, caldos y sopas. Los guisos quedan ensalzados si se incorpora tomillo a la cocción, que suele ser lenta y prolongada. Una vez elaborado se suele retirar.
  9. Tonificante natural. La sopa de tomillo se bebía como un excelente tonificante en caso de debilidad y falta de apetito, o bien para aliviar un empacho.