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Ciruelas umeboshi para ayudarte a depurar
Estas ciruelas fermentadas con sal y hojas de shiso son un talismán yang de la cocina macrobiótica. Los samuráis las consumían para obtener abundante energía: la que viene de un alimento ligero que ayuda a eliminar lo que lastra al organismo al tiempo que lo nutre y revitaliza.
Al tratarse de un alimento fermentado, aportan bacterias probióticas que mejoran la microbiota. También enzimas y ácidos orgánicos que les confieren propiedades digestivas, alcalinizantes y detoxificantes.
En Japón a menudo se trocean para acompañar el arroz. Puedes utilizarlas también para condimentar tus platos, sea en forma de pasta o de vinagre.
La pasta de umeboshi es ideal para incluir en salsas de ensalada, mezclar con arroz o untar como paté. También se puede diluir un poco en un té kukicha.
El vinagre es el líquido que queda de fermentar las ciruelas. Puedes usarlo para aliñar ensaladas, verduras o cereales. Les dará un toque entre ácido y salado.