La piel es el órgano más grande del cuerpo y nuestra primera barrera de defensa frente a las agresiones externas. Aunque se regenera de forma natural constantemente, en ocasiones puede sufrir lesiones que hagan que la recuperación sea más complicada y puedan quedar cicatrices. De ahí que existan multitud de productos, como las cremas y las tiritas cicatrizantes, que están diseñados para acelerar la regeneración de la piel y minimizar las cicatrices.
Aunque no eliminan por completo la cicatriz, sí pueden mejorar su aspecto, así como la textura y el tono de la piel. No obstante, sus resultados dependen de diversos factores como la constancia al aplicarlos, la gravedad de la lesión o su ubicación.
Qué son las cremas y las tiritas cicatrizantes
Las cremas y las tiritas cicatrizantes son productos que se aplican directamente sobre la piel y ayudan a que cicatrice y se recupere más rápido después de sufrir una lesión o herida (cortes, rozaduras, quemaduras…).
Tanto las cremas como las tiritas suelen contener ingredientes activos que favorecen la regeneración celular y reducen la inflamación, como extractos naturales (de centella asiática, rosa mosqueta…) y sustancias químicas. Sus ingredientes también pueden ayudar a hidratar la piel y estimular la producción de colágeno y elastina, esenciales para la salud de la piel.
Normalmente se pueden encontrar en las farmacias o parafarmacias y existen diferentes tipos que varían tanto en su composición como en su modo de acción.
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Cómo se usan las cremas y tiritas cicatrizantes
Ambos productos al aplicarlos crean un ambiente propicio para la cicatrización de la piel:
- La crema puede aplicarse en caso de heridas más grandes, mientras que las tiritas suelen estar indicadas para heridas menores y superficiales.
- Las tiritas cicatrizantes, además de contener ingredientes activos para regenerar la piel, también actúan como una barrera protectora que ayuda a mantener la herida limpia y protegida de bacterias y otros microorganismos que pudieran retrasar el proceso de curación de la piel. La capa adhesiva de la tirita crea una barrera que sella la herida y ayuda a mantenerla húmeda, algo esencial para una buena cicatrización.
Cómo favorecer la cicatrización de forma natural
Además de las cremas y tiritas cicatrizantes, existen soluciones más naturales para favorecer la cicatrización. Algunas de las más efectivas son:
- El aloe vera, el cicatrizante por excelencia. El gel que se encuentra en el interior de sus hojas tiene propiedades regenerantes y antiinflamatorias y se puede aplicar directamente sobre la piel.
- La rosa mosqueta es otro reconocido cicatrizante. El aceite de las semillas de la rosa mosqueta ayuda a la regeneración de la piel debido a sus altas concentraciones de ácidos grasos esenciales y vitaminas antioxidantes, como la C y la E. La aplicación continuada de este aceite atenúa las cicatrices y mejora su apariencia. Lo puedes aplicar directamente sobre la piel de la zona afectada.
- La centella asiática o gotu kola se ha utilizado tradicionalmente en la medicina ayurvédica por sus efecto reparador y reafirmante de la piel, en la curación y alivio de quemaduras, arañazos, heridas, llagas y úlceras. Se puede encontrar la planta seca o en extracto líquido, tintura o polvos.
- La miel tiene efecto antibacteriano, con lo que evita infecciones, y tiene también un efecto positivo en la cicatrización de heridas y quemaduras. La puedes aplicar directamente sobre la piel y cubrirla con una gasa estéril.
- El aceite de coco tiene propiedades antimicrobianas y es un excelente humectante natural. Puede ayudar a mantener la piel suave e hidratada, algo muy importante para la cicatrización. Se puede aplicar directamente sobre la herida.